Opinión

Para hacer visible al mundo un concejo sorprendente

Para hacer visible al mundo un concejo sorprendente

Para hacer visible al mundo un concejo sorprendente / LNE

"El patrimonio de Ribera de Arriba es tan rico y variado que a fuerza de hacerse presente se volvió invisible". A esta frase suele recurrir un gestor cultural para resaltar cómo muchas de las singularidades artísticas de este pequeño municipio en la confluencia de los ríos Nalón y Caudal, gozne de las Cuencas con el área central y puerta al sur de la metrópoli astur, permanecen ahí, a un paso de todo y de todos, sin que muchos ciudadanos reparen en ellas quizá por tenerlas tan a la vista.

La afirmación sirve también para definir la esencia misma del concejo, su naturaleza ontológica. Estamos ante uno de los territorios más sorprendentes de Asturias por la calidad de sus prestaciones, su exquisita cultura y su extraordinaria y vanguardista dotación de equipamientos. Un lujo que LA NUEVA ESPAÑA quiere compartir con los asturianos. Para eso tienen a su disposición desde ayer nuestra sexta edición digital, https://www.lne.es/ribera-de-arriba/. En la carrera por profundizar en eso que los teóricos han coincidido en bautizar como hiperlocalismo, el nuevo soporte marca otro hito como referencia de una entidad de población con menos de 1.800 habitantes. Sus vecinos cabrían con holgura en la sala principal del palacio de Calatrava en Oviedo.

El tamaño no importa. Sí el servicio a los lectores, los verdaderos propietarios, en definitiva, de los medios de comunicación. Quienes les premian con su fidelidad, convirtiéndolos en fuentes creíbles, o quienes estimulan su rigor y creatividad, elevando el listón de la exigencia. Nunca nadie antes había emprendido un proyecto informativo para un núcleo tan pequeño. Casi de periodismo a domicilio. Estamos felices por ello.

La de Ribera de Arriba es la historia de un concejo unido, para bien o para mal, a la térmica de Soto de Ribera. Desde su puesta en funcionamiento hace 62 años, la economía local depende del kilowatio. La generación transformó una zona rural en otra industrial, situando su renta per cápita entre las más elevadas y llevando el municipio a competir en una liga muy por encima de su dimensión y peso demográfico. También esa presencia dominante marcó el paisaje y propició una lucha constante por la calidad ambiental en la que se fueron ganando batallas.

Nada sería viable sin personas dinámicas detrás empujando, vecinos implicados que colaboran en las iniciativas y buscan garantizar la continuidad

Al grupo que quema carbón le queda menos de un año de vida. Su cierre está solicitado y pendiente de autorización. Los de gas no van a extenderse más allá de 2030. La central afronta una transformación radical para convertirse en un laboratorio de la transición ecológica. Una pequeña planta de hidrógeno, almacenes de energía y un hidrotornillo en el río servirán para ensayar las tecnologías energéticas del mañana. A pesar del giro, Ribera seguirá siendo uno de los principales nodos eléctricos del Principado por su subestación.

Los recursos que entran por esta vía en las arcas municipales permiten sostener un nivel de servicios envidiable. El Ayuntamiento, con casi 5 millones de presupuesto, llegó a tener una liquidez muy por encima de esa cantidad en los bancos, dinero dispuesto para pagar con prontitud a proveedores y acometer inversiones. No existe camino sin pavimentar. Las instalaciones deportivas son extraordinarias. Un auditorio cubierto, otro al aire libre, un área recreativa vistosa. Por si fuera poco, los vecinos gozan de unas prestaciones inusuales y ayudas muy superiores a las de administraciones equiparables. Paraíso etnográfico, la casi totalidad de los abundantes hórreos fue restaurada con subvenciones a fondo perdido. Los niños reciben regalos y visitan destinos lúdicos en viajes sufragados por el consistorio. Hasta quieren llevarlos a París. Los universitarios reciben apoyo financiero.

La que fue en su momento la despensa de Oviedo, la impresionante vega de Bueño, está desaprovechada. Fragmentada y en desuso, incluso suscitó el interés de empresarios chinos. Los mimbres para resurgir como potencia hortofrutícola, a rebufo de la moda de los alimentos de cercanía, permanecen intactos. De lograr ese objetivo, la industria agroalimentaria está llamada a jugar aquí un destacado papel, con la mantequería de Velganecia como emblema.

Esa metafórica huerta planta hoy cultura. La enumeración de instalaciones repletas de programación apabulla: La Casa de las Artes y las Ciencias –antigua casona de los Prieto–, el Aula de Matemáticas, la Central Artística, el Centro de Interpretación del Hórreo, el Centro Social de La Caballería, casi una casa de cultura en cada pueblo, el edificio de servicios múltiples.

Acogen muchos eventos para paladares gourmet porque la apuesta de los organizadores, para atraer público en un panorama muy competitivo, siempre intenta diferenciarse y rozar la excelencia. Así nacieron y se consolidaron el Festival de Jazz, el de Fado y Poesía, el certamen de pintura al aire libre, los encuentros de escritores o las citas corales.

Y, en fin, qué contar de la belleza de este estratégico balcón al trono de la Mostayal, la Gamonal y el Monsacro. En el itinerario de la "Senda de los 20.000 pasos" entre la Catedral de Oviedo y las capillas del Aramo y territorio natural para extender la "Vía Verde" ovetense, nunca defrauda al senderista. Su cuidada gastronomía, tampoco. El turismo, con mucho recorrido por completar, abre otra ventana de oportunidades.

Quedan en el tintero unas cuantas ideas: un polígono industrial de estilo nórdico, una pista para bicis de montaña, una urbanización en marcha... Nada sería viable sin personas dinámicas detrás empujando, vecinos implicados que colaboran en las iniciativas y buscan garantizar la continuidad asegurando el relevo generacional. Para compartir experiencias y dar testimonio al mundo de sus inquietudes y logros, LA NUEVA ESPAÑA emprende este reto apasionante, con la misma seriedad y profundidad de siempre, desde un espíritu constructivo e innovador, pero en un formato diferente que tendrá también correlación en el papel.

"Todo lo que nos une". Con este lema corporativo nos presentamos en sociedad. Todo aquello que nos acerca tiene su reflejo en el periódico. Nos vincula el amor a esta tierra, el sentimiento de pertenencia y el orgullo de ser asturianos. Desde hoy, quedamos más pegados que nunca a Ribera de Arriba y a los riberanos.