Tereñes (Ribadesella),

Bárbara MORÁN

A unos meses de cumplirse un año del final de las obras de rehabilitación y ampliación de la carretera que da acceso al pueblo riosellano de Tereñes, han salido a la luz algunas deficiencias del remate de la calzada que han dado como fruto siete argayos que traen de cabeza a los vecinos.

Los desprendimientos son de diversas consideraciones, van todos seguidos y comienzan en un extremo de la vía peatonal que discurre paralela a la carretera. Concretamente, empiezan desde la rotonda del barco y finalizan a unos veinte metros. «Los vecinos están preocupados por el estado de este tramo que lleva así más de un mes y cuando vuelva a llover, seguirá argayando», comenta José Manuel Álvarez, vecino de la zona y propietario de la Panadería Maos situada justo enfrente del trayecto de la vía peatonal que está tomado por los argayos.

Los siete desprendimientos son para el Ayuntamiento de Ribadesella fruto de las obras que se hicieron hace casi un año para rehabilitar la carretera. Lo aseguró ayer Juan González Martino, Concejal de Obras, que explicó que el pasado 15 de febrero el Consistorio remitió un escrito a la Consejería de Administraciones Públicas exigiendo la reparación de los argayos y sobre todo «la ejecución de muros de contención u otro sistema que evite más argayos en un futuro. Martino insistió en que el Ayuntamiento «hizo sus deberes en este tema y pidió responsabilidades al Principado para solucionar el problema de este tramo de la carretera ya hace casi un mes y se está esperando respuesta».

El Partido Popular de Ribadesella considera que los deberes no están hechos ya que «más de un mes con el itinerario peatonal tomado por los argayos es demasiado tiempo dando un mal servicio y poca seguridad para los vecinos y paseantes», denuncia Verónica Blanco, presidenta del PP riosellano.

Los conservadores aseguraron además que llevan días recibiendo las quejas de los vecinos por el estado de la vía. El PP exige al Ayuntamiento «más responsabilidad y determinación ya que han pasado suficientes días para que la vía peatonal siga tomada por los argayos».

La rehabilitación integral de la vía superó los 500.000 euros de inversión, que fueron financiados por el Gobierno central, el regional y el Ayuntamiento de Ribadesella.