Siejo (Peñamellera Baja),

Hablar del corro de Siejo es hablar de la historia más brillante del bolo palma en la comarca oriental asturiana. Los mayores y los que no lo son tanto recuerdan cómo la situación estratégica de la localidad de Peñamellera Baja, parada obligada de los autobuses que iban dirección a Llanes y Cabrales, hacía que gentes venidas de diferentes puntos de la región aprovechaban para echar unas partidas durante el tiempo de espera.

Al igual que en otros muchos corros, durante décadas fueron habituales los concursos de bolos y en el caso de la peña La Cortina, que dio nombre al bar del pueblo de Siejo, no fue una excepción. Especial mención cabe hacer de los famosos desafíos entre Felipe y «El Conde», dos de los jugadores más destacados de la región, en la época de mediados del siglo XX y que son recordados todos los años con la celebración de un torneo en el mes de agosto que en la edición de este año reunió a más de cuarenta chavales de categorías inferiores.

Este corro también vio dar sus primeros pasos en el mundo de los bolos a todo un campeonísimo como Antonio Real Fernández, más conocido como «El Barberu de Panes», que fue en cuatro ocasiones campeón de Asturias de primera categoría individual, otras tres por parejas y llegó a participar en quince ocasiones en el Campeonato de España, quedando como tercer clasificado en 1964 en categoría individual y cuarto en el año 1974 tanto en individual como en parejas, junto a Isidro Caballero.

Toda una leyenda que, además de vencer a muchas de las leyendas del bolo palma en la región a lo largo de su excelsa carrera deportiva, recibió el premio «Pico Peñamellera» en el año 2000, en reconocimiento a su trayectoria, y que ha sido el espejo donde mirarse para muchos jóvenes jugadores iniciados en el corro de Siejo.

Entre estos jóvenes que fueron saliendo de la peña La Cortina hay que destacar a varios jugadores actuales de la peña La Cortina que también han cosechado importantes éxitos. Entre ellos, Francis Morán, presidente de la peña y que llegó a ser subcampeón de Asturias infantil y séptimo en el campeonato nacional, así como Carlos Monje, que fue campeón de Asturias juvenil y de tercera categoría individual, al igual que Manuel Verdial y Paco el de Cuñaba, que también obtuvieron el título en tercera categoría individual.