Ribadesella, María TORAÑO

«El objetivo ha sido poner a la cueva de El Pindal en el siglo XXI», aseguró ayer María González-Pumariega, guía del yacimiento ribadevense durante los últimos 12 años. La experta presentó en el Centro de Arte Rupestre de Tito Bustillo de Ribadesella su libro «La cueva de El Pindal, 1911-2011. Estudio de su arte rupestre cien años después de Les Cavernes de la Région Cantabrique», surgido de sus trabajos de doctorado.

«En el año 2000 me encontraba con que tenía que explicar la cueva con documentación de 1911 y de 1954 porque no había nada más», aseguró González-Pumariega sobre los motivos que la llevaron a desarrollar exhaustivamente una catalogación de todos los dibujos y grabados que atesora El Pindal, ubicada en el cabo de San Emeterio, en la localidad de Pimiango. La cueva, declarada Patrimonio de la Humanidad en 2008, cuenta con «investigaciones muy tempranas», según la autora, ya que la primera publicación data 1911, solo tres años después de ser descubierta en 1908 por Emilio Alcalde del Río. «Las fotografías de aquella época sirven para estudiar los cambios y comparar el estado actual con el de entonces», comentó González-Pumariega. Para la guía era importante dejar el blanco y negro a un lado y en su libro los dibujos de El Pindal cobran vida gracias al brillo y el color de las fotografías actualizadas. Por lo que se convierte en una actualización monográfica de una cueva «conocida pero, en cierto modo, olvidada», según la ficha del libro.

El texto se divide en dos apartados. Uno con el catálogo textual y descriptivo de los hallazgos, con las características técnicas y los diferentes temas de discusión que se han abordado a lo largo del último siglo. Por otro lado, la segunda parte es un inventario estructurado en forma de fichas que recoge todos los dibujos y grabados de la cueva. «Por suerte esta es una gran cueva pero a la vez discreta así que hemos podido recopilarlos exhaustivamente todos», afirmó la historiadora. En esas fichas aparecen también algunos de los últimos descubrimientos como el grabado de una oreja de algún animal identificado hace dos meses por Marta Soto, experta de la cueva de El Buxu.

González-Pumariega (Oviedo, 1964) es Licenciada en Historia e Historia del Arte. Durante los años de facultad tomó contacto con la Prehistoria en el equipo de estudiantes que durante el verano excavan en alguna cueva con el catedrático Javier Fortea, fallecido en octubre de 2009 y a quien está dedicado el libro, publicado por Ménsula Ediciones.

A la presentación también acudieron los alcaldes de Ribadedeva, Alejandro Reimóndez, y de Ribadesella, Ramón Canal. El primero hizo hincapié en la «conservación» tanto de la cueva como del propio entorno, por lo que siempre se ha apostado por «adquirir los terrenos de alrededor y preservar la zona en manos públicas». Para Reimondez «los tesoros de El Pindal necesitaban de esta difusión».