Piloña ya tiene escudo oficial. El equipo de gobierno socialista -que cuenta con mayoría absoluta- aprobará en el pleno que se celebra el jueves en Infiesto un emblema oficia y definitivo para el municipio. El nuevo blasón recibió el visto bueno de la agrupación VIP en la comisión informativa previa al pleno y la abstención del PP. La iniciativa, que se impulsa para evitar que otra Corporación pueda modificarlo a su antojo como ocurría hasta ahora, cuenta con un informe favorable del Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA) como respaldo, según explicó el alcalde, Iván Allende.

El escudo de Piloña representa a dos caballeros contornados de plata sobre ondas de plata y azur que representan a Pelayo y su escudero, a su paso por el río Piloña, en su huida de las tropas musulmanas para refugiarse en las montañas; sobre sus cabezas puede vislumbrarse una Cruz de la Victoria de oro y piedras preciosas, que simbolizan la victoria. En los flancos aparece escrita la leyenda en letras de plata "Adelante mi escudero que mi caballo pie halla".

El escudo cuadrilongo de base redondeada fue elegido por ser éste el tradicional de la Heráldica española frente a otras formas en punta de influencia francesa habituales en los siglos XVIII y XIX por influencia borbónica; el diseño refleja las armas recogidas en el escudo de 1789, la más antigua representación que se conserva del escudo de Piloña. La propuesta de blasón no supone crear uno nuevo, pues al menos desde el siglo XVIII Piloña cuenta con una armería propia. La reproducción más antigua -la ya mencionada de 1789- se encontró en unas escuelas municipales antiguas y en 1935 fue reubicada en la Casa Consistorial, aunque por separado: el escudo está en las escaleras principales mientras que la corona se encuentra en el salón de plenos. Los cambios desde entonces han sido numerosos: en la fachada del Ayuntamiento (finalizada en 1882) aparece sin timbre; con la república no aparece la cruz y en los años noventa se simplifica con forma apuntada.