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FRANCISCO JIMÉNEZ MOYANO | Militar, da una charla en Cangas | Diálogos orientales

"Profesionalizar el Ejército fue determinante en su evolución"

"Las fuentes cristianas exageran la batalla de Covadonga y las musulmanas la ridiculizan; fueron cientos contra miles"

Francisco Jiménez Moyano. SILVEIRA

Francisco Jiménez Moyano es teniente coronel del Ejército de Tierra, diplomado en Relaciones Internacionales y máster en Seguridad. Es docente, además, de la Enseñanza Militar Superior de Régimen del Personal de las Fuerzas Armadas. Hoy, a las 20.00 horas, participará en un encuentro en el parador de Villanueva, en Cangas de Onís, sobre "La batalla de Covadonga desde tres puntos: histórico, militar y religioso", donde aportará su experiencia en el segundo campo.

-¿Qué significó la batalla de Covadonga desde el punto de vista militar?

-Desde el punto de vista militar la batalla de Covadonga consolida el levantamiento en fuerza de Pelayo contra el poder del Amir Anbasa y los partidarios de Agila. A la muerte de Vitiza -rey de los visigodos- unos pretenden que sea Agila el sucesor, entonces un niño, y otros Rodrigo. El aula regia, que sería como una especie de parlamento, la principal asamblea política visigoda, elige a Rodrigo, polarizando la escena política. Los partidarios de Agila invitan a los musulmanes y se produce la batalla de Guadalete, en 711, donde muere el rey Rodrigo.

-¿Y la figura del rey Pelayo?

-Tras la batalla de Covadonga la figura de Pelayo como jefe político y militar queda igualmente consolidada. Pelayo, huido de las autoridades cordobesas en 718, se refugia en la zona de los Picos de Europa. Los naturales del territorio lo eligieron como jefe en una asamblea en la actual Cangas de Onís.

-¿Está de acuerdo con la teoría de algunos historiadores de que se ha engrandecido y exagerado el relato de la batalla de Covadonga hasta convertirlo en leyenda?

-Es muy difícil, como ocurre en la actualidad, que el cronista -hoy hablamos de historiador o periodista- reseñe los hechos con total fidelidad a la realidad. Desgraciadamente, muchas fuentes se han perdido y los datos nos llegan por copias o citas de terceros. Tenemos dos grandes grupos de fuentes, las que podemos llamar cristianas, que exageran, y las musulmanas, que ridiculizan. Si nos olvidamos de los adjetivos calificativos, creo que en Covadonga se enfrentaron unos pocos rebeldes pelagianos, quizás cientos, contra bastantes más, unos pocos miles, soldados de Anbasa capitaneados por Alqama.

-¿Qué sucede después de la batalla?

-La derrota fue notable, y la mortalidad de las fuerzas de Alqama, también. Tras la batalla el vacío de poder es tal que el gobierno musulmán en Córdoba termina por marcharse del territorio, se consolida entonces la rebelión y se inicia el embrión de nuestra actual España.

-El historiador Javier Fernández Conde sostiene que tras la batalla se encuentran motivos económicos más que religiosos, pues la población local rechazaba someterse a los tributos musulmanes, ¿qué opina de esta teoría?

-Las motivaciones en la rebeliones y en las guerras son siempre variadas. Pero tras las excavaciones dirigidas por Jorge Camino, Rogelio Estrada y Yolanda Viniegra en el Homón (sobre La Carisa) y en el Collado del Muro (sobre el Camín de la Mesa) y tras el congreso celebrado al respecto en octubre de 2012, podemos concluir varias cosas. En primer lugar, que los que queda de la monarquía visigoda se refugia en Asturias. En segundo lugar, que el territorio se entrega mediante pacto, posiblemente en tiempos de Abd al Aziz (el segundo valí de Al-Ándalus), siendo evidente desde el punto de vista arqueológico que no se combate y se destruyen las murallas construidas. Felipe Maillo Salgado, arabista de la Universidad de Salamanca, demostró que hubo un exagerado incremento de impuestos y los lugareños de la actual Asturias dieron por incumplido el pacto. Nace la rebeldía pelagiana en el año 718 y tenemos la batalla, quizás en 722.

-¿Cuál ha sido, desde su perspectiva, la evolución del Ejército desde aquella época, siglo VIII, hasta la actualidad?

-La evolución es enorme. Pero podemos decir que factores como el dominio del oficio -hoy profesionalidad- es determinante. Pelayo era un profesional militar y todo apunta a que era bueno. Las fortificaciones del Homón y el Muro también fueron hechas por profesionales. Estas fortificaciones proporcionan una posición de fuerza a los visigodos derrotados y refugiados en la actual Asturias frente a los bereberes musulmanes invasores y partidarios de Agila.

-¿Qué futuro le augura, ahora que el Ejército se ha profesionalizado?

-Estamos en la senda correcta.

-Es especialista en relaciones internacionales y en seguridad, ¿la del yihadismo es una amenaza real para España?

-El yihadismo es una amenaza para nuestro modo de vivir occidental, más que para España en particular.

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