Roban 9 motosierras en el tercer hurto que sufre Posada en la última semana

Una tienda de maquinaria agrícola se convirtió en la madrugada de ayer en el tercer negocio que sufre un robo en la última semana en la localidad de Posada de Llanes, donde el lunes desvalijaron una óptica y la ferretería contigua. Los cacos se llevaron nueve motosierras valoradas en unos 7.000 euros y acentuaron la preocupación de vecinos y comerciantes.

Begoña Alonso es la gerente de Comercial Arduengo, el establecimiento asaltado. La empresaria alternaba ayer el agradecimiento hacia vecinos y agentes de la autoridad por preocuparse por lo ocurrido con la resignación de que el daño podía haber sido mucho mayor, pero también con la rabia de ver cómo Posada es blanco de robos sin poder hacer nada.

"Nos llamaron los vecinos a las tres de la mañana y nos dijeron que la puerta de la tienda estaba abierta, la alarma sonando y que habían entrado", relató Alonso, que reside en Cangas de Onís. Antes que los propietarios, tan sólo ocho minutos después de que saltara la alarma, llegaron las patrullas de la Guardia Civil y la Policía Local. "Fueron muy eficientes y muy rápidos, pero los pobres no pudieron hacer nada", añadió la gerente.

Cuando llegó a Posada se encontró únicamente las puertas de su tienda abiertas "de par en par" y en el suelo los casquillos del bombín, que los ladrones machacaron para poder entrar. "Lo llevaron con mucho cuidado. Como si fuera lo que tenían vendido esa noche", apuntó antes de enumerar hurtos en una tienda de baños, en la gasolinera y en varias viviendas.

LA NUEVA ESPAÑA ha informado en exclusiva sobre la operación de la Guardia Civil para buscar a una banda organizada que hurta en casas de toda la costa asturiana, pero sobre todo en la comarca. En esta ocasión creen que los cacos entraron, fueron de frente hacia las motosierras y salieron, antes de que la alarma activase a la Guardia Civil y la Policía. No se escaparon, sin embargo, a la vista de un vecino, quien vio cómo se subían a un turismo de color granate.

"Posada tiene un acceso muy rápido a la autovía: en cinco minutos están en ella y en dos horas en el País Vasco", resumió Begoña Alonso, quien demanda a las autoridades "más patrullas. Por mí se molestaron muchísimo y la gente de abajo, los guardias y los policías, se molestan en investigar, pero llega un momento en que no sé lo que pasa", lamentó la empresaria antes de remarcar que "si se lo llevan es porque tienen compradores".