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Una cazadora de larga espera

Sara Buenaga hace doblete con dos jabalíes y lamenta los dos años y medio que ha tardado en ser admitida en el coto de Llanes

Sara Buenaga, con su segundo jabalí. P. M.

Sara Buenaga, la joven riosellana que lleva dos años y medio esperando ser admitida en el coto de caza de Llanes, mató el sábado su segundo jabalí con la cuadrilla llanisca de Ricaliente. La joven solicitó su acceso al coto cuando tenía 16 años y en julio cumplirá 19, un tiempo durante el que no ha entendido el silencio de la directiva del coto.

Suele ir de montera con los perros de su padre, porque para ir de puesto (los que disparan) tiene que pagar 60 euros en cada cacería. "Tenemos quince al año, serían 900 euros, y no puedo", explicó la joven, que si hubiera sido admitida cuando era menor de edad habría pagado menos que un socio normal (como sería ahora), que paga 180 euros por asociarse y 160 por la caza menor. La riosellana, que no cesa de demostrar su afición por la caza, mató su primer jabalí en noviembre, cuando fue de puesto por primera vez en una cacería de mujeres organizada por el coto "La Parraguesa". Como el sábado tenían poca gente, Buenaga repitió de puesto y mató su segundo jabalí, en esta ocasión en la zona de El Cuetu. La joven ha visto cómo amigos con un año menos han entrado al coto en poco tiempo. A ella le dijeron "que harían una reunión para ver si lo aprobaban y todavía igual".

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