El Ayuntamiento de Peñamellera Alta reabrió ayer la carretera de acceso a la localidad de Llonín, que el pasado domingo estuvo cortada debido a un argayo de tierra, piedras y árboles que se originó a causa del mal tiempo que se está viviendo en los últimos días en la comarca y que está dejando varios desperfectos en distintos puntos del Oriente.

El camino en cuestión se mantuvo cortado durante toda la mañana, pero los operarios comenzaron a trabajar en las labores de limpieza a primera hora de la tarde, trabajos que realizaron rápidamente y sin encontrar ningún contratiempo reseñable.

Lo único que hubo que lamentar del corte de la carretera fueron las molestias que supuso para los vecinos de la localidad, que para salir o entrar al pueblo debían utilizar la pista de La Molinuca, un camino menos habitual y que se habilitó para tal fin durante las horas que la vía normal de acceso a Llonín estuvo cortada para que los vecinos no quedaran aislados durante esas horas.