Un camino en la localidad riosellana de Vega, situado en el barrio de La Cecotilla, se ha hundido debido a los problemas causados por algunas obras que se han llevado a cabo en los alrededores. Una situación que ha causado que las fuertes lluvias caídas durante los últimos meses no drenaran correctamente, provocando inundaciones en los patios de los vecinos de la zona, tal y como denuncia un habitante del pueblo, Carlos Jiménez.

"Cuando se construyó una de las casas, se pusieron a lo largo del camino unas arquetas para los cables de la luz en las que, no sabemos por qué, se cuela el agua", explica Jiménez. Para él, esto tiene dos problemas. El primero, que los cables de la luz están "nadando", algo que considera "muy peligroso". El segundo es que el agua está "arrastrando la tierra y la gravilla" que hay bajo el cemento, lo que, unido al paso de la maquinaria pesada para realizar unas obras en un terreno aledaño, ha contribuido a hundir el camino.

Así, el agua que baja por ese camino no puede drenar correctamente por la alcantarilla por la que debería hacerlo, ya que al llegar a la parte hundida se forma "una balsa de agua" que busca salida y la encuentra en los patios de los vecinos de la zona. Además, a esto hay que unir que las alcantarillas se encuentran "sucias y llenas de sedimentos", por lo que tampoco recogen bien el agua que les llega.

Jiménez cuenta que ya ha puesto en conocimiento del Ayuntamiento este problema, tanto por escrito como verbalmente, en varias ocasiones, sin que hayan obtenido una solución.

Había arrancado, eso sí, la promesa tanto de la aparejadora como del arquitecto municipal de que pasarían a ver qué ocurría, pero salvo un técnico que "negó el problema", según cuenta, desde el consistorio no se ha hecho nada más.