El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Ribadesella criticó ayer la gestión del equipo de gobierno en lo relacionado con la puesta en marcha de la zona azul de cara a la próxima Semana Santa. El PSOE aboga por que este servicio sea gestionado por el Ayuntamiento en un primer momento, en lugar de contratar a tal efecto una empresa privada durante cinco años sin que se resuelvan las dudas que su implantación genera.
Tales afirmaciones fueron realizadas ayer en una comparecencia del portavoz del PSOE en el Consistorio riosellano, José Luis Díaz Bermúdez, y el edil Secundino Díaz Cayuela. Ambos aseguraron que el equipo de gobierno está utilizando la implantación de la zona azul en clave electoralista, pues entrará en vigor "un mes antes de las elecciones" y "será un golpe de efecto".
"Entendemos que la gestión de la zona azul en la calle Comercio debe ser municipal. Si sale bien, y las expectativas parecen buenas, pues los vecinos y comerciantes en su mayoría entienden que es algo positivo, se puede llegar a privatizar", destacó José Luis Díaz. El PSOE tacha de "arriesgado" privatizar el servicio a un mes antes de las elecciones. "Corremos el riesgo de que salga mal y que nos comamos el marrón todos los vecinos de Ribadesella", advierten. Creen que lo ideal sería reducir el número de plazas de los aparcamientos de pago en un primer momento, y entienden que, de este modo, la gestión es asumible por parte del Ayuntamiento.
Ribadesella implantará la zona azul en 69 plazas de aparcamiento entre la calle Comercio (47 plazas por la mañana y 11 más por la tarde, cuando se libere la zona de carga y descarga), y la vía Manuel Caso de la Villa (11 estacionamientos).
En la zona de la playa la idea es implantar zona naranja con un máximo de cuatro horas sobre 232 plazas en la calle Dionisio Ruisánchez, Ramón y Cajal, el aparcamiento del final de la playa de Santa Marina y una parte de la carretera de San Pedro.
Los socialistas pidieron también que el equipo de gobierno explique las características del contrato especial de limpieza durante la semana de piragüas, por el que se abonan 35.000 euros al año desde 2015. Dicen en el PSOE que dicho contrato se firmó en base al informe sobre la fiesta del año 2014, cuando estaba permitido acampar en la zona del Malecón y la parcela de San Juan. Sospechan que se cobra por un servicio que no se da, al estar permitido acampar desde 2015 tan solo en la zona de San Juan. Califican el asunto de "grave" y piden una revisión del contrato.
José Luis Díaz y Secundino Díaz Cayuela mostraron también su disconformidad con las obras que se están desarrollando en la avenida de Tito Bustillo. A juicio de ambos, no están mejorando la zona y "se metieron a calzador". Sostienen que, a medida que avanzan, hay más problemas relacionados, por ejemplo, con el estrechamiento de la calzada en varios puntos. "Se actuó sobre las aceras de El Tocote que no son públicas", señaló Díaz Cayuela.
