"Estamos satisfechos con el resultado, la indemnización es la acordada". El abogado José Antonio Rivero, el representante de los hijos de Severino Canteli, el octogenario que murió en noviembre de 2016 por las heridas causadas tras una caída de una altura de dos metros a la salida de un funeral en Lastres, se ha mostrado complacido por la indemnización de 52.569,68 euros que el Ayuntamiento de Colunga debe abonar a los dos descendientes del fallecido, tal y como recoge la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Gijón.

Los hechos se produjeron al filo de las 19.00 horas del 12 de noviembre de 2016, cuando Canteli, vecino de Fuentes (Villaviciosa), regresaba al coche después de asistir a un funeral en Lastres junto a dos amigos para regresar a su casa. En ese recorrido, se precipitó a la pista polideportiva del barrio de El Manso, una caída de dos metros en la que se dio un fuerte golpe en la cabeza y se fracturó seis costillas y por la que tuvo que ser ingresado en el HUCA, donde finalmente murió.

En este caso, el Juzgado de Gijón entiende que la responsabildad del accidente recae de forma íntegra sobre el Ayuntamiento de Colunga, pues apunta a que la "falta de barreras y luz artificial" en la zona "generó un riesgo que excede lo razonablemente admisible".

Por otro lado, descarga de culpabilidad la avanzada edad de Canteli, de 85 años, pues entiende la sentencia que "teniendo en cuenta la altura desde la que cayó, de forma sorpresiva 'a plomo', cualquier persona en las mismas circunstancias podría haber sufrido el mismo desenlace". A esto hay que añadir que en la sentencia no se cree que se hayan aportado pruebas suficientes que justifiquen que la tardanza de la ambulancia para trasladarle al HUCA (la primera que iba desde Arriondas se averió y hubo que esperar a que llegara otra procedente de Gijón) influyera "de forma relevante en el fallecimiento de don Severino".

Por último, el titular del Juzgado tampoco cree que haya pruebas de que el hombre pudiera conocer el lugar con anterioridad incluso de que se fijara en la pista y la caída que había hasta ella en el momento en el que se dirigía hacia la iglesia de Santa María de Sábada y entiende que "cualquier persona que transitara por la zona y no la conociera podía haberse caído en dicha pista" por las condiciones de falta de luz y barreras de seguridad, a lo que hay que añadir la fina lluvia que caía en aquel momento. A todo ello, además, hace también referencia el atestado judicial del accidente.

Con todo esto, el titular del Juzgado reconoce el derecho de los dos hijos de Severino Canteli a ser indemnizados con 26.284,84 euros cada uno, una resolución contra la que el Ayuntamiento de Colunga puede interponer un recurso de apelación en un plazo de quince días ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias.