La feria para toda clase de ganados de Santillán mantuvo ayer el tipo. Siguiendo la tónica de los últimos años, hubo pocos animales -62 reses y nueve ovejas- pero mucho público, y al final de la mañana la mayoría de ejemplares de bovino habían cambiado de dueño. Eso sí, con precios similares o incluso inferiores a los de ediciones anteriores, según se quejaron los profesionales del sector.

Los asistentes justificaron la menor presencia de vacas en base a varios factores. Para empezar, no pocos ya habían cerrado las ventas con los tratantes los días previos en casa, para ahorrarse el transporte a la feria.

Para seguir, porque muchos ganaderos prefieren reservarse para la feriona de Mayo de Corao, donde, al haber presencia de más compradores, los precios pueden ser más competitivos.

El corte de la carretera del Pontón (N-625), en obras para reparar unos hundimientos y que impide el tráfico de vehículos pesados, fue otro de los obstáculos a afrontar y que provocó que algunos ganaderos que viven más allá de Campurriondi desistieran de acudir al evento, ya que no les compensaba dar un rodeo con los animales comprados o vendidos por el municipio de Ponga.

También influyó el hecho de que muchos profesionales del sector estén soportando una gran carga ganadera hasta el 31 de agosto para cumplir los compromisos exigidos por la PAC. "Como la primavera no fue buena y hubo tanta sequía, el ganado se está alimentando con hierba comprada en vez de con pastos naturales, y eso tampoco favorece las ventas", reflexionaba el ganadero local Carlos Félix Fernández,

Los tratantes Juan Carlos Arenas (de Piloña) y José Antonio García (de Cangas de Onís) se hicieron a primera hora con los mejores ejemplares de bovino, que cargaron en sus camiones.

Entre los incondicionales de la cita se encontraba ayer el ganadero Elías Fernández, que bajó desde el núcleo de Argolibiu con nueve ovejas, a las que no pudo dar salida. "Tenía setenta y estas son las que me quedan por culpa del lobo, así que prefiero venderlas antes de que también me las mate", indicó.

La proliferación de lobos y el avance del matorral volvieron a ser los temas estrella de la jornada, que contó con la presencia de numerosos políticos. Con los comicios a la vuelta de la esquina, los candidatos municipales prometieron más controles de población de la fauna salvaje y desbroce de majadas, ante el escepticismo de los ganaderos.