Es el gamonéu es uno de los quesos más antiguos de Asturias. Y también es uno de los más caros de España, el de la variedad del puerto. Su producción está íntimamente ligada a la calidad y a la tradición. La primera responde a unos parámetros de producción escrupulosos. Y la segunda, a la conservación de una elaboración íntimamente ligada a los puertos y los valles de los concejos de Onís y de Cangas de Onís.

Sin embargo, hay que saber adaptarse a los tiempos y maridar, en su justa medida, la historia con la era moderna. Y en ello están en Onís, donde la producción de esta joya gastronómica crecerá este mismo año de la mano de dos nuevas queserías, una de ellas se está construyendo en Bobia y, la otra, en Demués. Es ésta última la que hará virar el futuro de uno de los quesos más emblemáticos de la región. No sólo aportará más producto al mercado, sino que lo hará de la mano de una ganadería propia. Generará empleo, por el momento, seis puestos de trabajo de gente de la zona. Todo el sobrante será reciclado y tratado con el fin de aprovechar sus posibilidades y colocar los productos resultantes en el mercado. De esta acción saldrá un proyecto solidario que destinará parte de lo recaudado a la lucha contra el cáncer de mama.

Alberto Álvarez ha desarrollado su vida laboral en Cataluña, pero ha vuelto a su Asturias natal con la intención de ensalzar los valores de su tierra y, más concretamente, los del gamonéu del valle. Pretende "afinar la calidad hasta el máximo" para vender el queso fuera de las fronteras asturianas. De hecho, su idea es que las piezas estén en los escaparates de las tiendas gourmet del país en lugares como Madrid o Barcelona. Ya hay, de hecho, acuerdos con algunas de ellas para que así sea.

Uno de los problemas a los que se enfrenta el gamonéu, cuenta Álvarez, "es la falta de leche de calidad en el sentido de que hay un problema de escasez de ovejas y cabras" con lo que los elaboradores, dice, "trabajan más con leche de vaca".

La Quesería Demués criará, al menos en el inicio, "cien ovejas, setenta cabras y seis vacas" separadas entre sí. Es sólo una cifra de arranque para sacar la primera producción, prevista para este mismo año. Con ella, por cierto, acudirán al World Cheese Awards que se celebrará en Oviedo del 4 al 7 de noviembre de 2020.