En Cangas de Onís están decididos a poner fin al "top manta" habitual en el mercado semanal de los domingos. De ahí que de paso que el Ayuntamiento ha optado por reorganizar la cita comercial dominical, de gran éxito por la elevada afluencia de público que recibe, la Policía Local aproveche para incrementar la vigilancia.

"La ordenación del mercáu que se está llevando a cabo estos últimos meses para cumplir con la normativa del covid-9 y definir de forma definitiva la ubicación de los puestos que no existía, contempla también el control de los que se instalan sin licencia. Tras varias advertencias, el domingo pasado se procedió por parte de la Policía Local a incautar y clausurar los que carecían de la misma", explica a LA NUEVA ESPAÑA el alcalde de Cangas de Onís, José Manuel González Castro, en referencia a la operación de días atrás.

Cuatro son las denuncias que tramita la Policía Local de Cangas de Onís contra otros tantos individuos (llamados coloquialmente "manteros") dedicados al "top manta" en el recinto del mercado semanal. Fueron realizadas el pasado 16 de agosto, además se les confiscó toda la mercancía que tenían expuesta a la venta.

Fue la primera que los agentes, junto a la Guardia Civil, ejercieron una actuación de ese tipo en la popular plaza, en una jornada con gran afluencia de turistas y visitantes, pues, se trata de una de las citas ineludibles en la vieja capital del Reino de Asturias.

Desde principios del pasado mes de julio un par de vigilantes de seguridad contratados por el Ayuntamiento regulan los dos puntos de entrada, al recinto -uno, por la calle Mercado; y otro, por la zona de la iglesia parroquial de Santa María-, al que se accede con la obligatoria mascarilla y con dispensarios portátiles de gel desinfectante para las manos. Esa regulación permite liberar a agentes y auxiliares de la Policía Local para hacer cumplir las preceptivas medidas sanitarias -mascarilla, la reciente de no fumar- y de seguridad tanto dentro de la propia plaza como por las diversas calles de la urbe canguesa.

La reordenación de los puestos de venta ambulante ha pasado por dividir en cuatro grupos el mercado en función del producto que se comercialice.