Ribadesella “no tiene actualmente ningún edificio público” que pueda acomodar como centro para indigentes o transeúntes. El alcalde, Ramón Canal, responde así a la propuesta que en este periódico hacía el presidente de la asociación de pensionistas “Los Más Grandes”, José Luis Avín. El jubilado alertaba de la cantidad de personas que duermen al raso en la comarca y proponía utilizar la escuela de Xuncu a tal efecto.
“El problema es que la escuela de Xuncu no existe”, aclara Canal. Es una edificación “sin papeles, ni proyecto técnico, se hizo en su día, pero es un esqueleto que no podemos aprovechar, y menos para este uso”, indica el regidor. Pero, además, la propuesta de los pensionistas “es más complicada de lo que ellos plantean. Organizar una infraestructura así requiere una gestión, debe cumplir una serie de características y ya sólo la contratación del personal por parte de una administración pública sería imposible”. Por este motivo Avín había propuesto que fueran los voluntarios de la asociación quienes se hicieran cargo del traslado de transeúntes hasta el centro asignado a su pernocta. “El voluntariado funciona para determinadas cosas, pero hay otras que deben gestionarse con una organización. Eso sería inviable”, zanja el regidor.
