La Benéfica, el teatro de Infiesto recuperado por Rodrigo Cuevas, reabre sus puertas con folixa y música de Rozalén

Folixa en Infiesto por la reinauguración de La Benéfica. El antiguo teatro, cuya rehabilitación ha sido impulsada por un grupo de artistas encabezado por Rodrigo Cuevas, ha vuelto a abrir sus puertas para festejar la conclusión de la primera fase de las obras de restauración. La jornada estuvo cargada de talleres, danza y conciertos, entre los que destacó la actuación de la cantante Rozalén, implicada en el proyecto por su amistad con Cuevas. La reapertura generó gran expectación en la capital piloñesa, donde todos celebran "los avances de esta ilusionante iniciativa".

La historia de La Benéfica se remonta a 1926, cuando la Sociedad de Socorro Mutuo de Piloña construyó esta antigua nave en la capital piloñesa para albergar un espacio de encuentro social con actividades teatrales, cine y bailes. Tras veinte años, esta "utopía artística y solidaria" llegó a su fin con la disolución de la sociedad, lo que llevó al edificio a cambiar de usos y a deteriorarse con el tiempo. Ahora, 97 años después, lo que comenzó siendo un ambicioso sueño de devolverle esa vida cultural a La Benéfica se está haciendo realidad.

"La historia se repite, volvemos a reactivar La Benéfica con la misma ilusión con la que lo hicieron hace casi cien años los que pensaron que era necesario construir este teatro. La comunidad en aquel momento lo levantó con esa ilusión del pueblo y está pasando lo mismo ahora con mucha gente que colabora, comercios y administraciones. Eso es lo bonito", afirmó Sergi Martí, uno de los tres socios fundadores de La Benéfica, junto a Nacho Somovilla y el ya citado Rodrigo Cuevas.

Precisamente, la fiesta de esta inauguración simbólica es el resultado de esa "deuda pendiente" que los impulsores del proyecto tenían con todas aquellas personas que participaron y colaboraron en la financiación del proyecto de renovación de este espacio cultural a través de un crowdfounding y otras donaciones. Aunque todavía quedan algunos arreglos por hacer, ya con el tejado, escenario y almacén a punto, la estructura de La Benéfica va tomando forma. Su propuesta cultural ya ha comenzado con pequeñas actividades, como señaló su anfitrión, Rodrigo Cuevas: "Esto también nos sirve para creérnoslo. A partir de ahora se harán actividades ocasionales. Cuando podamos abrir como espacio cultural, ya de forma regular, haremos una programación más continua y un desarrollo del proyecto más a largo plazo".

Además de celebrar dos años de arduo trabajo, con esta jornada también se quiso reivindicar el papel del mundo rural en la sociedad. "Hablamos mucho del reto demográfico y de atraer población. Una de las razones que me hicieron venir a vivir a Infiesto fue este proyecto y pensar que alguna vez se podía hacer realidad", aseguró Mireia Delgado, otra de las implicadas en el proyecto. "Hay que apostar por la cultura y políticas para atraer a gente joven, porque en los pueblos también nos divertimos", añadió.

Desde el mediodía hasta las cinco de la tarde se llevaron a cabo diferentes talleres para niños y jóvenes, propuestas gastronómicas, y actuaciones de bandas regionales. Además, hubo una invitada especial: la cantante Rozalén, quien deleitó a los asistentes con su música y admitió sentirse "como en casa". Para las ocho de la tarde estaba previsto el comienzo de la gala inaugural en el interior del antiguo teatro con muchas sorpresas para cerrar la velada con un buen broche de oro.

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