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LETICIA SÁNCHEZ RUIZ | Escritora, publica su nuevo libro, "Cuando es verano en el mar del Norte"

"Reflexiono sobre las relaciones de todo tipo, pero en especial sobre la familia"

"Quería hacer una novela sobre ese momento en el que el inspector Poirot reúne a los sospechosos y acaba diciendo quién es el asesino"

Leticia Sánchez Ruiz, con su nuevo libro. FERNANDO RODRÍGUEZ

Leticia Sánchez Ruiz (Oviedo, 1980) ha permanecido un tiempo silente, que no inactiva. Tras siete años sin llevar nada a imprenta, acaba de ver la luz su tercera novela. "Cuando es invierno en mar del Norte". Con su primera obra, "Los libros luciérnaga", ganó en 2009 el IX Premio de Novela "Emilio Alarcos", dos años después se llevó el premio "Ateneo Joven de Sevilla" de Novela por "El gran juego". La editorial Pez de Plata lanzará en una semana el último libro de la ovetense.

- ¿Qué ocurre cuando es invierno en el mar del Norte?

-Pues siguiendo el verso de Ángel González que da título al libro, es verano en Valparaíso. Siempre hay cosas que están pasando al mismo tiempo en distintos sitios.

- ¿Y qué cosas pasan?

-La novela es la historia de un crimen contada desde dos puntos de vista distintos. Uno es el de la familia Larfeluil, en la que todos están acusados de un asesinato. Por un lado, es la investigación de todos los miembros de la familia para saber quién es el asesino, y por otro está la investigación de Dora, una periodista cultural en paro que se obsesiona con este crimen y trata de saber quién es el asesino y quién es la víctima. Unos quieren saber quién lo mató y ella por qué lo mataron, qué hizo ese hombre en su vida para que lo matasen.

- ¿Novela negra?

-No, no es novela negra, como mucho azul marino. No tiene el ritmo, ni los personajes ni la denuncia social de la novela negra. Es más bien misterio e intriga al estilo de Agatha Christie.

- La familia reunida en una casa y el inspector interrogando recuerda a "10 negritos".

-Es en esa línea. La parte de la familia se desarrolla en una casa en una pequeña isla en la bahía de una ciudad. Una casa aislada en una ciudad a modo de San Sebastián. Siempre me gustó ese momento de las novelas de Agatha Christie en las que al final el inspector Poirot reúne a todos los sospechosos en una habitación y va descartando uno por uno hasta al final decir quién es el asesino. Me propuse hacer una novela de ese momento.

- ¿Dónde nace la historia?

-Es una mezcla de muchas de mis obsesiones. Cuando era pequeña encontraron un muerto en un pinar de mi pueblo, en Berbes, Ribadesella, en un sitio por el que yo solía pasar. Fue un ajuste de cuentas por drogas que no tenía nada de misterioso, pero a mí obsesionó pensar que podría haberlo encontrado yo. Siempre me ha llamado mucho la atención la gente que encuentra los cadáveres, cómo reaccionan. En la novela, esa es la parte de Dora, a quien la aparición del cadáver acaba afectando muchísimo, se obsesiona con ello.

- Dora es periodista, habrá visto más cadáveres.

-Una cosa es que sepas que vas a ver un muerto y otra que te lo encuentres al abrir una puerta, al doblar una esquina o al caminar en una playa, y que además sea una persona asesinada. Yo me obsesionaría con el caso, lo seguiría por los periódicos ferozmente, querría saber qué había pasado. Soy una persona muy obsesiva.

- ¿Dora es Leticia Sánchez Ruiz?

-No, yo no soy ninguno de los personajes de la novela y soy todos. Sí que es cierto que Dora es una periodista cultural, como yo, y se habla bastante de periodismo. Además, Dora no es una periodista de sucesos, investiga el asesinato a su manera.

- Usted ha trabajado en varios medios de comunicación.

-Sí, y una vez intentaron mandarme a un suceso y menos mal que llegó otro compañero y fue él. Me moriría si tuviera que hacer eso. Es lo mismo que le ocurre a Dora, investiga el caso con sus armas de periodista cultural, que son limitadas y no tienen nada que ver con ese caso. Lo hace leyendo noticias en los periódicos y hablando con sus contactos, pero, claro, son contactos del mundo cultural.

- ¿Cómo se documentó usted para la novela?

-De mil maneras distintas. Leyendo mucho sobre el tema, artículos de criminología, noticias de sucesos en los periódicos. El crimen tiene su origen en una muerte real que seguí por los periódicos. Se trata de la historia de un hombre que desapareció de una forma muy misteriosa y su cadáver apareció en una playa. Nunca supe qué había pasado, no volvió a salir en los periódicos. Fue en Vizcaya. El hombre salió del trabajo y desapareció, encontraron su coche en una zona de acantilados a la que su familia decía que nunca iba. La familia insistía en que el muerto no tenía enemigos y era un hombre feliz, pero su cadáver apareció una semana después en una playa. Visité la zona y por eso en la novela salen playas y acantilados. Siempre me pregunté qué había pasado con aquel tipo, por qué se marchó. Me hizo pensar cuántas cosas llevamos en nuestro interior que la gente no sabe. Podemos tener una doble vida. Me pregunto cuánto saben los demás de nosotros, las personas que nos rodean, nuestra familia, nuestros amigos, o cuánto sabemos nosotros de los demás. Es la gran pregunta de la novela, cuánto sabemos de los que tenemos al lado.

- ¿Y ha encontrado la respuesta?

-Sí. La conclusión final del libro, la resolución del caso, da una respuesta.

- Las respuestas, las buenas y las malas, están casi siempre en la familia.

-Me obsesiona la vida de la familia de la novela, qué es lo que esconde, y no solo en relación al muerto, que todos dicen no conocer. Poco a poco empiezan a salir las relaciones entre los familiares. ¿Qué pensaríamos si nos dicen que en nuestra familia hay un asesino, desconfías de todos o pones la mano en el fuego por unos sí y por otros no?

- ¿Una reflexión sobre la familia con la justificación de un asesinato?

-La novela es una reflexión sobre las relaciones en general, las de amistad, las de pareja, pero principalmente las de familia, que son las que más peso tienen en nuestra vida.

- El título del libro es un homenaje al poeta Ángel González, la historia rinde tributo a Agatha Christie, ¿hay más referencias literarias?

-Al contrario, la ausencia de literatura es uno de los desencadenantes de que Dora se ponga a investigar. Ella está en paro y acaba de romper con su pareja, está en una situación bastante mala. Está tan deprimida que no puede ni leer. Es como cuando tienes la cabeza tan atormentada, tienes tanta angustia que no te concentras. Ella es una grandísima lectora y al no poder leer se está desquiciando. "Si hay un día que no puedo leer sería el día empezaría a volverme loca". Se agarra al muerto como salvación de su depresión. Si eres lector y por alguna causa no puedes leer, la ausencia de literatura es un desencadenante para volverte un poco tarumba. Esa idea es la que impulsa a Dora a investigar.

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