La pandemia lo dejó todo un poco parado, pero Asturias sigue aspirando a ser capital mundial de la poesía. El promotor de la iniciativa, el periodista Graciano García, director emérito vitalicio de la Fundación Princesa de Asturias, es consciente de que el proyecto se la ha ido "felizmente" de las manos. En la actualidad cuenta con el apoyo de 14.000 "fundadores", como se denomina a las personas e instituciones que se han unido a la causa.

El próximo objetivo es multiplicar exponencialmente esa cifra y buscar adhesiones internacionales. García quiere que esos 14.000 "fundadores" se conviertan en 100.000 apasionados que defiendan "que la poesía está en el origen de todo, en las primeras palabras del ser humano y en las despedidas". El promotor está convencido de que "los asturianos sabemos hacer cosas grandes". Lo dice la persona que puso en marcha los premios "Príncipe de Asturias". Por ello pedirá a esos 14.000 seguidores que busquen nuevos socios, "si cada uno suma a otras dos personas ya tendremos a unos 30.000 más, y de ahí con tiempo y trabajo sostenido llegaremos a los 100.000", asegura García.

La otra forma de relanzar la iniciativa después de la pandemia será utilizar las redes sociales para lograr adhesiones internacionales. De los 14.000 apoyos con los que se cuenta en la actualidad, unos 1.500 son de personas que viven fuera de Asturias, pero García quiere llegar más allá. Para ello ya se ha puesto en contacto con el eurodiputado ovetense Jonás Fernández para que sus colegas del Parlamento Europeo se sumen a la iniciativa y la difundan.

Graciano García está también muy contento por la postura del Ayuntamiento de Oviedo, que, además de sumarse al proyecto con una declaración en el Pleno municipal, estudia la posibilidad de que una plaza de la ciudad sea la "Plaza de la poesía". Así se lo ha hecho saber a García el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli.

"Ahora es la gente la que tiene que impulsar el proyecto", explica el promotor. "Yo haré lo que pueda, pero ahora felizmente la cosa se me ha ido de las manos y está en manos del pueblo", explica, y añade, "eso es lo importante, que la gente lo haga suyo". Graciano García asegura que "la gente quiere soñar, quiere proyectos, necesita salirse de la batalla del miedo y apostar por iniciativas ilusionantes".

"Es un proyecto histórico para Asturias que solo necesita tiempo", mantiene. Por el momento los asturianos han respondido a la llamada y ahora se espera que sirvan de altavoz para llevarla a todo el mundo y que Asturias sea nombrada "Capital mundial de la Poesía".