El Pleno de aprobación inicial del presupuesto municipal de Oviedo para este año –253 millones sumados los 241,11 millones generales y los 11,89 millones de la Fundación Municipal de Cultura–, salió adelante este lunes en una sesión extraordinaria con los 14 votos del equipo de gobierno frente a los 13 de la oposición. La sesión fue saludada como el pistoletazo de salida, en diferido, de las "grandes inversiones" del primer mandato de Canteli y como la confirmación de una "gran mentira" para la oposición. Donde el concejal de Economía, Javier Cuesta, vio y explicó músculo y combustible para "apuntalar la recuperación económica" del municipio, PSOE, Somos y Vox incidieron en que llega tarde, tras un año de prórroga presupuestaria, con "recortes" y con serias renuncias en lo tocante a los planes europeos financiados por los Edusi.
En su exposición inicial, Javier Cuesta explicó que Oviedo, tras un año de prórroga presupuestaria y un ejercicio anterior, el de 2020, lastrado por el covid, "vuelve a la senda de la recuperación", de una forma "más solida", para que "Oviedo siga siendo más competitivo". Cuesta tampoco echó las campanas al vuelo y aclaró que las circunstancias (sentencia de plusvalía que en Oviedo han supuesto cuatro millones menos, transferencias del Estado que llegaron a última hora y contexto general) han hecho que la elaboración de este presupuesto sea de ""una enorme complejidad" y que "la recuperación dista de ser algo claro y plausible". El edil del PP cargó contra las administraciones regional y central por tratar a las locales como "de segundo nivel", y afirmó que, mientras los Ayuntamientos asumieron toda la carga para asistir al ciudadano durante la pandemia, a la hora de repartirse los recursos "llegó muy poco". Lo que viene de Europa, afeó, tampoco es ninguna bicoca, sino, más bien, ilustró con una metáfora, "el suplicio del Tántalo, con unos plazos de ejecución endemoniados". Su conclusión fue que el Estado debe "resolver el problema estructural de la financiación local, a lo que Pedro Sánchez se niega".
En el apartado más descriptivo de lo aprobado inicialmente este lunes, Cuesta explicó que las cuentas de 2022 atienden "compromisos explícito", "hacen énfasis en las políticas de empleo y de dinamización de la economía, con ayudas para empresas, comercio, turismo, tejido cultural e inversiones concretas". Estas, resumió en su intervención final, "tienen un efecto multiplicador en la economía muy relevante, y ese es el objetivo"
No hizo el concejal de Economía un dibujo demasiado detallado, pero sí citó que hay 25 millones para la mejora del municipio, tanto de la zona urbana como de la rural, 13 millones de euros para transformar infraestructuras, 2,4 para el abastecimiento, 3 para eficiencia energética o más de 8 para edificios del patrimonio municipal, como centros sociales, colegios, equipamientos culturales o el edificio de Seguridad Ciudadana. Tampoco faltó el dato de que se refuerzan los servicios básicos, se invierte mucho en áreas como la limpieza, con más de cuatro millones de euros, o en Cultura, que sube casi un 10%.
En la refriega con la oposición, de tono no tan alterado como en otras sesiones, hubo, no obstante, un leve conato de incendio cuando Cuesta, cansado de escuchar a todos los grupos la crítica del incremento de los salarios, le preguntó a Ana Taboada a qué dedicaba su tiempo de 75% de dedicación municipal. "Deberían fichar a la entrada, que cada vez que llamamos a su grupo nunca hay nadie. Los recursos de los ciudadanos destinados a su nómina deberían tener más retorno". La portavoz de Somos hizo constar su enfado por el ataque y exigió una rectificación por la "falta de respeto".
Cristina Coto (Vox): Seguimos esperando a Godot
Desde la oposición, Cristina Coto, portavoz de Vox, fue la primera encargada en ponerle pegas al presupuesto municipal. Y cómo. "Lo que está a la luz no necesita candil", soltó Coto. Y pasó a enumerar la lista de ausencias de las cuentas regionales y locales de este año: "ni Ronda Norte, ni Ópera, ni Ave, en medio del silencio atronador del Alcalde ante su amigo Barbón". Y siguió con las de aquí: "Es todo una quimera, La Vega, la Fábrica de Gas o el Asturcón, es una política de naftalina que los ovetenses ya no compran, quieren políticos que se pongan a trabajar. Mientras, seguimos esperando a Godot", zanjó. Su compañero, Hugo Huerta, aportó otras críticas como el incremento de las ayudas a la cooperación en le extranjero y Coto sumó, además, las críticas a la Fundación Municipal de Cultura por no atender un incremento en las inyecciones de dinero a la Fundación Musical Ciudad de Oviedo para que los músicos de la OFIL puedan actualizar sus salarios y por no conceder una ayuda importante a la Castalia en su aniversario.
Rosón (Somos): "Nunca se había gestionado tan mal"
El concejal de Somos Rubén Rosón, exconcejal de Economía en el anterior mandato, realizó una crítica a la estructura económica de las cuentas de este año, en las que denunció, además de "retraso y recortes", un "nuevo pufo". Este, en su análisis, es el que se deriva del crédito de 19,78 millones que incorpora para este año el Ayuntamiento, "solo para que figuren en el papel obras que no se realizarán", ironizó. El edil de la formación morada se preguntó por qué pedir dinero a las entidades financieras cuando el Ayuntamiento tiene 33,5 millones sin gastar. "Se necesita más dinero y se tiene, nunca antes se había gestionado tan mal, ningún ovetense pediría un crédito para una casa si tuviera con qué pagarla, pero ellos con el dinero público no hacen lo mismo, ¿es que le debemos un favor a alguien?", relató.
Rosón, además, censuró lo poco realizado por el equipo Canteli hasta la fecha ("quitar los bancos de la Escandalera con mentiras", "poner una bandera al lado de donde había otra", "recortar en las ayudas directas a las familias". Su conclusión, si el dinero no se destina a las becas, a las ayudas ni al tejido productivo, es que el equipo de gobierno dedica el dinero a "sus propios salarios". El concejal de Somos cargó contra los sueldos de los ediles, los de los asesores y los directores generales. "Salarios para amigos y salarios propios, a eso destina el plus de fondos, no a los ovetenses; la prioridad no es gobernar, es llenarse los bolsillos de dinero público", concluyó. Su compañero Nacho del Páramo añadió el apunte a la renuncia a la mitad de los fondos Edusi, y el "clasismo", propio del "pensamiento de la extrema derecha", que supone haber renunciado, dijo, al proyecto del bulevar que el gobierno anterior dejó planteado. Ana Taboada, en una segunda réplica, incidió en las críticas y sumó el epíteto de ser "gobierno de postureo solo pendiente del photocall y de viajar en tropel a Madrid".
Ana Rivas (PSOE): "El presupuesto es como Pinocho, no es real y miente"
La socialista Ana Rivas remató la enmienda a la totalidad de su grupo y la réplica de la oposición con un largo repaso a forma y fondo de las cuentas, para concluir que el equipo de Gobierno "no puede presumir de buena gestión" y que los retrasos y falta de inversión que denunciaban en el gobierno anterior son ahora su propia norma. "¿Cómo lo califican ahora? Ustedes aplican la ley del embudo", les soltó para hacer ver la distinta vara de medir. Según Rivas, el presupuesto de Oviedo incumple la ley al tramitarse fuera de plazo, tras 14 meses de prórroga y, para colmo, sin las limitaciones de la regla de gasto que las administraciones locales sufrían antes de esta bula con motivo de la pandemia. Tampoco le sentó bien a la concejala el PSOE los ataques de Cuesta a las otras administraciones, y le hizo ver que también los gobiernos regional y nacional tienen que enfrentarse a estrecheces y gastos extra. Según contaría en su segunda réplica, el gobierno de Canteli "tiene excusas para todo, como los malos estudiantes".
Pero las críticas de Rivas fueron también para los incumplimientos de los propios objetivos del gobierno de Canteli, los de ayudar a la reactivación económica. La edil explicó que el 58% de las empresas que solicitaron ayudas por el covid se quedaron sin ellas y que "el único sector que les importa es de la hostelería y los inquilinos de los grandes locales". "El resto, a su suerte", remató. Enumeró también las formas "chapuceras" de gestionar las ayudas a las familias y, en el otro lado de la balanza, tener una previsión de un incremento del 40% en pago de horas extras a los trabajadores municipales. Con las inversiones, siguió, tampoco se cumplen los objetivos, pues tras el anuncio de destinar el 20% del presupuesto a inversiones, en el primero fue solo el 4,83%, en el pasado no hubo con la prórroga, y ahora "solo proponen algo más del 10%; no tienen claras sus prioridades", resumió.
En sus primeras conclusiones Rivas acusó al gobierno local de haber dejado sus grandes proyectos para ejecutar en el próximo gobierno, entre 2024 y 2025, pues, afirmó, "todo parece a punto de caramelo pero nada aparece". Se refería a una larga retahíla de proyectos: polideportivo de Trubia, Ronda Sur, reforma del Auditorio, edifico de Seguridad Ciudadana, el Silicon Valley de Ventanielles, el Palacio de los Niños, La Fábrica de la Vega o la del Gas. El presupuesto, vaya, es "como Pinocho", "no es real y le crece la nariz con las mentiras".
Las enmiendas a la totalidad de Vox, Psoe y Somos decayeron, así como las parciales, que incluían una aportación extra para La Castalia, el aumento de financiación para la OFIL o recuperar la subvención para la Academia de la Llingua.
