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La peatonalización de Mendizábal recupera la fuente ornamental de la plaza Porlier

La reforma del eje hasta Fruela limitará con bolardos el acceso, solo para residentes, y reducirá a la mitad las calzadas, con adoquín negro

Un año después de lo anunciado, el Ayuntamiento de Oviedo ya cuenta con un proyecto definitivo para contratar la peatonalización del eje que va desde el teatro Filarmónica a la confluencia de Fruela con Jesús, correspondiente a las calles Mendizábal, Ramón y Cajal y Pozos. Está previsto que los trabajos duren cuatro meses y el precio de licitación, con impuestos, parte de 1,37 millones. Los planes del Ayuntamiento incluyen, además de la restricción del tráfico en la zona, a la que solo podrán entrar residentes y autorizados, la recuperación de la fuente ornamental que presidía la plaza Porlier hasta su remodelación en 1993 y que se convertirá ahora en una farola de piedra.

Según el proyecto al que ha podido tener acceso LA NUEVA ESPAÑA, el área de Infraestructuras del concejal Nacho Cuesta establece dos puntos para hacer efectivo el control del tráfico, con sendos bolardos retráctiles que se activan con una llave y quedarán instalados al inicio de las calles Mendizábal y Ramón y Cajal.

La conversión en calles peatonales de todas estas vías incluye la demolición de todo el firme existente con excepción de la acera y el murete que pertenecen al recinto del edificio histórico de la Universidad de Oviedo, que no se verá afectado. En el resto, se instalarán calzadas con adoquín negro, con la mitad del ancho que tienen en la actualidad. De esta forma, Mendizábal y Ramón y Cajal solo tendrán 3 metros para el paso del tráfico rodado habilitado y 2,5 en Pozos.

Las obras de peatonalización se aprovecharán para instalar o renovar diversos elementos del mobiliario urbano y alguna señalética de tipo led. En ese contexto, se propone una recreación de la fuente que había en el centro de la plaza Porlier. La original no tenía, en realidad, agua, y su función era la de ocultar un transformador eléctrico. Ahora se sugiere la construcción de una farola de piedra a imitación de aquel elemento.

Con este proyecto, que estaba previsto para el año pasado y del que se empezó a hablar hace dos tras las restricciones al tráfico en la salida del primer confinamiento, el equipo de Alfredo Canteli retoma las peatonalizaciones en el casco antiguo de la ciudad. En ese sentido, también está encima de la mesa la posibilidad de aplicar medidas similares en la calle Paraíso, a la espera de saber los planes definitivos para la Fábrica de Gas.

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