El Campo San Francisco acogió, como cada jueves de los meses de julio y agosto una nueva jornada de Bailes del Bombé. El concierto de la Banda de Música "Ciudad de Oviedo" se ha convertido en uno de los atractivos del verano ovetense y atrae a una gran cantidad de público. Y aunque no todos se animan a bailar, algunos veteranos se atreven a saltar al ruedo, en "agarrao".
Entre los asistentes había ayer quienes acudían a estos conciertos por primera vez, como la ovetense María Alcaraz, que quedó sorprendida y lo calificó de "muy bonito y espectacular". Había también asiduos como Ramón Martínez, quien dijo que "con este calor, en el Campo San Francisco y disfrutando de la banda "Ciudad de Oviedo", no hay mejor plan para un jueves por la tarde". Por su parte, Adita Menéndez recordó cuando ella era joven, la banda tocaba en el kiosco y venía a bailar: "Esta música es de siempre, ahora está todo cambiado, pero está precioso".
La reciente inauguración del kiosco no ha pasado por alto entre los ovetenses y la opinión general es positiva. "Ha quedado muy fino, parece de principios del siglo XX, pero han tardado muchos años" en arreglarlo, cuenta Carmen Rodríguez.
Pese a que son muchos los que se animan a bailar al son de la música, el paso de la pandemia también ha hecho mella en algunos hábitos de diversión. "Siempre me gustó venir, pero he perdido muchísimo, el covid nos ha hecho más sosos, aburridos… antes estaba lleno de gente y todo el mundo bailaba, ahora solo participan las cuatro personas de siempre. Pero hay que continuar, esto tiene que remontar", añade Carmen Rodríguez.
El Campo San Francisco se mantiene como punto de reunión de los ovetenses que, mientras pasean, disfrutan de la música de la banda. Los siguientes conciertos se celebrarán los próximos jueves 18 y 25, a las 19.00 horas.