Muere Ángel García, exdecano de la Facultad de Economía y "un grande de la Tuna"

"Era entrañable, afable y querido por los alumnos generación tras generación", dicen los cercanos al profesor, fallecido a los 64 años

Ángel García

Ángel García / LNE

Víctor Delgado

Ángel García, exdecano de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Oviedo, falleció este viernes a los 64 años. El profesor, natural de El Bierzo, impartió hasta el final del curso pasado las asignaturas de Economía y Microeconomía y era todo un referente en su facultad, a la que llevaba más de media vida vinculado. Además de su labor como docente, el profesor destacaba por su pasión hacia la tuna, hasta el punto de recibir hace unos meses el prestigioso título de "Grande de Tunaespaña", una asociación mundial e intergeneracional de antiguos tunos universitarios, nacidos en las ocho últimas décadas. "Era divertido, entrañable y afable", dicen los que le conocían, que le darán el último adiós este sábadoen un funeral en su tierra natal.

Carmen Benavides, actual Decana de la Facultad, conoció a García cuando ella aún se sentaba en el pupitre. "Yo estaba terminando la carrera y él era un recién licenciado que venía a hacer una sustitución. Quedé encantada con el cambio. Fue uno de los mejores profesores que he tenido en mi vida", afirmó en declaraciones a este periódico. Benavides, dos años menor que García y también leonesa, aseguró que cada promoción de alumnos que pasaba por sus clases "lo recordaba con mucho cariño y no se olvidaba de él jamás". Del exdecano destacó que era "brillante" intelectualmente, que tenía el carácter necesario para imponerse a la hora de dirigir la Facultad y que en las espichas siempre se animaba a tocar la guitarra.

El estado de salud de García ya era delicado desde principios de este año y por ello dejó de dar clase en el presente curso 2023/2024. No obstante, cumplió una de sus últimas grandes ilusiones en la graduación de los alumnos de la Facultad. El docente cantó con la tuna de veteranos de la Universidad de Oviedo en el acto para sorpresa de los egresados. Y a juicio de los presentes, lo hizo muy bien.

Su vinculación con la música y las tunas viene desde muy joven, ya que formó parte de la tuna de Minas en su época estudiantil y, hace diez años, entró en la tuna de veteranos, en la que era especialmente fino con la bandurria. Con la tuna visitó universidades, pero también amenizó las veladas en muchos geriátricos y hospitales. En este mundo musical y universitario conoció a José Pontón, presidente de la tuna de Veteranos de la Universidad, que reconoció estar muy afectado por la muerte de "un gran amigo y una gran persona". Pontón remarcó el esfuerzo que le ponía al trabajo y a todo lo que hacía en la vida como una de las virtudes de García, con el que compartió muchas horas en las llamadas "Cuarentunas". Aseguró que a veces en la tuna lo tachaban de "cascarrabias", pero también que era "un cacho de pan con un corazón que no le cabía en el pecho".

Pontón compartió agradecido que hace dos semanas le dieron a su amigo, al que llamaban "Gelo", una despedida en vida muy emotiva y alegre. Allí se juntaron más de 50 tunos para cantar, tocar y disfrutar de la pasión que les unía. El presidente de la tuna de veteranos recordó el gusto de García por el vino, aunque siempre con moderación, "como todo lo que hacía en la vida". También desveló que en aquel encuentro, a sabiendas de que le quedaba poco, les pidió que su funeral no fuese triste. "Se lo dijimos ya a su hija porque él lo quería así. Mañana cantaremos con la tuna para darle la despedida que se merece en su funeral. La única duda que tengo es si nos saldrá la voz. Nuestro Gelo era eso, pura alegría y bondad", zanjó.