El viaducto de Ángel Cañedo se desconecta de Ventanielles

El viaducto de Ángel Cañedo se desconecta del barrio de Ventanielles medio siglo después. Los trabajos de demolición del puente, indispensables para construir la nueva glorieta de Santullano, avanzan más rápido de lo previsto hasta el punto que el vano de la infraestructura más próximo al lado del Palacio de los Deportes lucía este jueves reducido totalmente a escombros.

La empresa Ogensa, adjudicataria de los trabajos, se puso unas tres semanas de plazo para desmantelar la mitad sur del puente, pero todo apunta a que la actuación podría finalizar antes de lo inicialmente previsto. Una vez reducida a escombros la parte del viaducto sobre los dos carriles actuales en sentido a Gijón de la "Y", los operarios desviarán el tráfico de ambos sentidos por esa zona para poder acometer el derribo de la otra mitad del puente, bajo el cual discurre actualmente toda la circulación del acceso a Oviedo.

Por otro lado, la concejalía de Infraestructuras, dirigida por el popular Nacho Cuesta, anunció ayer que las labores de colocación del tercer tramo de la pasarela peatonal del "arpa" de Santullano se ejecutarán el próximo martes. Los trabajos estaban inicialmente previstos para el jueves de esta semana, pero una complicación en el transporte de la gran pieza de acero obligó a retrasarlos.

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