Canteli quiere llevar espectáculos y grandes conciertos a la nueva plaza de la Cruz Roja

Un operario de la empresa responsable de los trabajos de construcción de la nueva glorieta de la Cruz Roja se afanaba ayer a la una de la tarde en quitar las cintas de plástico que hasta ahora impedían el acceso por los cuatro pasos de cebra a la nueva plaza mientras el Alcalde Alfredo Canteli y una comitiva municipal (concejales, operarios, empresa contratista, afines) recorrían el perímetro. No era una inauguración, recalcó el regidor, sino una "apertura al público". Por eso no hubo tijeras, ni cinta ni brindis. Pero queda para más tarde, "cuando el tiempo mejore", que la ciudad reciba la puesta en funcionamiento de su nueva entrada con "algo" especial: "algún concierto, algo que dé vida, que revalorice Oviedo".

La nueva plaza de la Cruz Roja no será, explicó el Alcalde, un mero distribuidor de tráfico. No será solo esa fuente que cambia de color y que mediante una conexión wifi permite combinaciones de fantasía. El equipo de Canteli insistió ayer, en esa no-inauguración /apertura, que de los 5.000 metros cuadrados de la nueva glorieta habrá unos 2.000 metros cuadrados en el espacio central que se utilizarán para acoger espectáculos, "grandes conciertos". Canteli se mostró entusiasmado con el nuevo equipamiento, definió la jornada como "día histórico para la ciudad" y destacó que la nueva plaza-mirador representa "el Oviedo que queremos".

Con esa idea de ir a más, Canteli admitió que el lugar podría resultar idóneo para otro tipo de celebraciones. No solo espectáculos musicales. El Alcalde considera que las celebraciones vinculadas a competiciones deportivas podrían desarrollarse allí e incluso llegó a fantasear con unos play-off con pantalla gigante instalada en la plaza y la fuente con una programación especial de tonos azulados.

Al paseo de apertura de la plaza asistieron el concejal de Planeamiento, Nacho Cuesta, el primer teniente de Alcalde, Mario Arias, y la concejala de Deportes y Educación, Conchita Méndez. También el presidente de la empresa Ogensa, Tomás Cimadevilla, el responsable del contrato en el Ayuntamiento, el ingeniero municipal Adolfo Onís, y el alcalde de barrio de la zona centro, Juan García.

EN IMÁGENES: La nueva plaza de la Cruz Roja de Oviedo ya está abierta al público

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Las rachas de lluvia y viento respetaron el cuatro de hora largo de apertura que también atrajo a la plaza a algunos vecinos, móvil en ristre. Una de ellas, Pepita Secades, se asomó con el Alcalde al extremo diseñado para ser un mirador y le pidió que quitaran algunos de los árboles que rodean Santullano. "Hay algunos buenos, pero otros son arbustos que no valen nada y no dejan ver la iglesia". "Poco a poco", le tranquilizaba, junto al regidor, el concejal Nacho Cuesta.

Antes, en la plaza, Canteli se había fijado en uno de los árboles plantados en el centro de la explanada, una roble, todavía sin hojas, pero de buen porte, según el regidor. A preguntas de los periodistas, que le transmitieron el temor de algunos vecinos a las condiciones que puede tener la plaza en verano y a la posible falta de sombra, Canteli juzgó que la "jardinería está muy bien terminada, hay mucho riego" y que confió en que no haya problema.

El Alcalde felicitó también a la empresa Ogensa por un trabajo "magnífico" desarrollado en "unos plazos razonables" y con "materiales de calidad". Canteli se sacudió de paso los problemas de tráfico que achacan a esta nueva glorieta. El Alcalde citó el caso de un amigo suyo al que sugirió entrar por otra ruta y ganó 5 minutos. "Hay otras alternativas, hay que moverse por otras opciones", sugirió. En todo caso, los atascos, explicó, "cada vez son menos". El regidor ovetense confió en que la situación mejore cuando las obras están terminadas y cuando se arregle la regulación semafórica, y admitió la posibilidad de que todavía exista "algún atasco pero asumible".

Dentro del semestre

Satisfecho con el resultado final, Alfredo Canteli insistió en que la nueva glorieta de la Cruz Roja es "un ejemplo del Oviedo que queremos, un Oviedo diferente" y confió en que se ponga en marcha, a no tardar mucho, la reforma que concluya la rehabilitación de todo ese tramo de entrada en la ciudad, contratando nuevos proyectos para la margen izquierda, en la que ahora no está prevista ninguna actuación. Sobre lo que está en marcha, el Alcalde calculó que podrá estar finalizado en el plazo de medio año. "No nos vamos a precipitar, pero del pilono para acá, dentro del semestre seguro que está, lo importante es que quede bien".

En lo que se refiere a la nueva glorieta, el Alcalde no echó en falta nada y aplaudió la forma en que está rematada: "Es accesible al cien por cien, en todos los aspectos, tiene bancos para descansar, tiene carril bici, no sé lo que le falta, yo creo que nada", concluyó.

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