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Un ascenso del Oviedo sería decisivo para multiplicar la actividad de una "ciudad triste"

Los empresarios y los comerciantes reclaman para el club "mayor apoyo de los políticos"

La plaza del Ayuntamiento de Oviedo, llena de aficionados carbayones celebrando el ascenso a Segunda en 2015.

El Oviedo busca el sexto ascenso a los cielos de Primera División. Tras los hitos de 1933, 1952, 1958, 1975 y 1988 el club azul lucha en 2019 para conseguir su primer ascenso a Primera División en este siglo. Lo pelea el equipo de Sergio Egea en el campo. Los azules marchan a tres puntos del play-off de ascenso a falta de cinco jornadas para la conclusión de la Liga regular. "Un ascenso sería vital", coinciden distintos representantes de diferentes asociaciones empresariales, conocedores del positivo impacto económico que tendría para la capital del Principado que su equipo regresase a la élite del fútbol nacional.

Apoyo a los azules no les va faltar: el tejido empresarial de la ciudad, en especial el sector servicios -hoteles, restaurantes y pequeños comercios- apuestan por el ascenso como alegría deportiva y como espaldarazo para la actividad económica de una ciudad de servicios como es Oviedo.

"Estar en Primera División te sitúa en 'otra Liga'. Para Oviedo y su repercusión sería decisivo. No hay más que ver lo que sucede en otros lugares en los grandes partidos. El movimiento económico que genera un fin de semana de partido es enorme y se multiplicaría en Primera, sería un impacto tremendo", dice Carlos Paniceres, presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo. "Lo que mueve el Oviedo se nota en el ámbito empresarial y la ciudad necesita visitantes. Los turistas pueden aprovechar un partido para conocer otros atractivos, como el Prerrománico", explica. Carlos Paniceres pide más apoyo político al club: "Hay que resolver el tema de los accesos al Carlos Tartiere, y lo digo también como aficionado. La accesibilidad al campo es francamente mejorable y sería bueno un consenso entre todos los grupos políticos del Ayuntamiento", concluye.

Pedro Caramés, presidente de la Asociación de sidrerías de Gascona, la calle con más tradición sidrera de la capital, no duda sobre la importancia del salto de categoría del Oviedo. Y cree, además, que sería enormemente positivo también para la popularidad de la tradicional bebida asturiana. "Ascender sería vital. Lo sabemos en Gascona porque tenemos varias pruebas que sirvieron de muestra. La más reciente el partido contra el Dépor, que fue una fiesta total por la calle. Oviedo es una ciudad atractiva de por sí, pero tener el equipo en lo más alto sería clave para vendernos más, un escaparate. Daríamos a conocer más todavía nuestra gastronomía y el escanciado: la cultura de la sidra se vería beneficiada", explica Caramés, que como Paniceres pide apoyo político para el club. "Tiene que tener ayuda total, tanto regional como local. Es necesario solucionar los accesos", finaliza.

Ignacio del Río, presidente de la asociación Oviedo Comercio, creada recientemente, le pone voz a los pequeños negocios, que también se beneficiarían de un hipotético ascenso. "Sería importantísimo, un área más para crecer y traer gente a la ciudad; Oviedo necesita actividad, está triste y hacen falta muchas patas que colaboren. Que el equipo de la ciudad esté en Primera para los comercios sería vital, lo es siempre que entre dinero a la ciudad. El fútbol genera movimiento, ya lo hace en Segunda División, y se multiplicaría en Primera", explica del Río. Cree también que es necesario un mayor entendimiento entre el Oviedo y las administraciones públicas: "Hay muchos temas sobre la mesa, desde las marcas hasta los accesos. El día que de verdad haya un problema será gordísimo. No sé que hay que hacer para solucionarlo, pero es evidente que se necesita un gran acuerdo".

Los representantes de la distintas patronales consultados coinciden en el gran impacto económico que tendría para el sector hotelero ovetense un ascenso a Primera División.

"El efecto tractor" . El fútbol es un motor de la economía española. La consultora Price Waterhouse Coopers (PwC) elaboró un informe para la Liga -cedido por la Cámara de Comercio de Oviedo a LA NUEVA ESPAÑA- en el que se detallan diferentes datos que ponen de relieve la importancia del fútbol. El estudio, de diciembre de 2018, teniendo en cuenta la campaña de los 42 equipos de Primera y Segunda en la 2016-2017, habla del "efecto tractor": los ingresos adicionales en otros sectores a raíz del fútbol. Hace dos temporadas fueron de 3.998 millones. El gasto medio por persona alrededor del estadio en restauración y compras fue de 29 euros, en gastos en transportes de 19 y en alojamiento llegó a los 122 euros. Además, se mide "el impacto económico de las visitas a museos, monumentos o atracciones turísticas cuando aficionados acuden a eventos deportivos de la Liga". El gasto asciende a un total de 100 millones de euros. Además, "el impacto generado por el gasto turístico derivado de la Liga es de 1.585 empleos", según el informe.

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