"Tranquilidad total y confianza", "esto no tiene nada que ver con lo del año pasado". No hay alarma. La línea es la correcta. Los mensajes llenos de optimismo vuelan en El Requexón, cerrado a cal y canto por la pandemia. Del vestuario a los despachos. Todos a una.
El Oviedo, pues, pasa el mal trago de la primera derrota del curso ante el Espanyol (0-2) con apreciable sosiego interno pese al mal inicio de Liga: dos puntos de nueve es ya la segunda peor marca de esta última etapa en la categoría de plata a estas alturas, solo superada por el Oviedo de Egea de la temporada pasada. Además, el conjunto azul es, hasta ahora, el menos goleador de los últimos años: un tanto en tres partidos. Factores que intentará ajustar el Cuco que, después de tres partidos, ha dejado claras sus preferencias en la plantilla con los recién llegados y ha lanzado varios mensajes.
La larga charla de Ziganda y Arnau en El Requexón y el papel de los delanteros. La semana oviedista tras el doble sopapo de Raúl de Tomás arrancó con sol y con una larga charla en la ciudad deportiva entre los dos capitanes de la nave en el aspecto deportivo. Francesc Arnau y el Cuco Ziganda estuvieron ayer reunidos durante más de una hora analizando la situación del equipo. De la cumbre se desliza unidad por ambas partes. El club, de hecho, valora positivamente la apuesta del Cuco por la cantera, con 5 futbolistas que jugaron en el filial en el once ante el Espanyol. Aunque dos fichajes de la dirección deportiva, Mujica y Cedric, estén en un evidente segundo plano.
El delantero solo jugó 18 minutos en tres partidos -en las dos últimas jornadas ni salió - y el extremo, diez. El 6% y el 3% de los minutos posibles respectivamente. Sorprende sobre todo la situación de Mujica: en un Oviedo falto de gol, con Rodri lesionado y Leschuk a la espera, casi no ha contado. El Cuco, preguntado sobre la posibilidad de jugar más directo, dejó esta frase tras el partido: "Para ello igual tendríamos que jugar con dos delanteros, que a día de hoy no los he visto". Automáticamente matizó: "No los he visto para ponerlos". En el club no ven esa frase como un tirón de orejas a los fichajes y le dan normalidad. No obstante, es la segunda vez que el entrenador manda un mensaje sobre los delanteros. A principios de septiembre señaló lo necesario que era la llegada de un ariete. Arnau, tras esa reflexión, le pidió calma en privado y poco después llegó Leschuk.
¿Quién hace los fichajes? Ziganda casi no cuenta con Cedric y Mujica, Aburjania lleva entrenamientos contados, Leschuk no ha podido debutar, Nahuel entra poco a poco, Edgar es inamovible y Femenías, de momento, es el titular en la portería. Solo son titulares, pues, un par de fichajes. La cantera, de momento, le ha ganado la partida a los recién llegados. ¿Preocupa en la dirección deportiva? De momento, no. Los fichajes, eso sí, han sido algo exclusivamente del departamento de Arnau. Aunque, con un matiz: todos ellos han sido consensuados con el Cuco. Es decir, Mujica y Cedric, intrascendentes hasta ahora, han llegado con el aval del navarro, según fuentes del Oviedo. "Son jóvenes, tienen que trabajar mucho. Tiene buena actitud (Mujica), pero pongo a los que creo que tienen que jugar y a los que mejor están", dijo el Cuco tras el partido ante el Espanyol preguntado sobre la ausencia del canario.
El vestuario cierra filas. Las sensaciones que transmite la plantilla del Oviedo no tienen nada que ver con las de la temporada pasada a estas alturas. Aquello era un funeral. Hoy, de puertas para adentro, existe confianza en el trabajo. Lo dijo ayer Femenías, destacado en las primeras citas, tras el entrenamiento. "Nos gustaría tener más puntos, pero tenemos que quedarnos con las cosas buenas que hace el equipo. Tenemos una idea clara y actitud". Además de despachar con Arnau, Ziganda tuvo tiempo para hablar con varios miembros importantes de la plantilla. Especialmente con Arribas, el capitán, que tuvo un grave error individual que costó el segundo gol del Espanyol.
Mossa y Sangalli estarán listos el sábado. La buena noticia para el Oviedo tiene que ver con la enfermería. Sangalli y Mossa se ejercitaron ayer en El Requexón. Ambos atraviesan problemas físicos y el lateral no fue ni convocado contra el Espanyol, pero el club espera que mañana entrenen al mismo ritmo que sus compañeros y puedan estar disponibles para jugar el sábado ante el Albacete.
