La unidad de las familias dinamiza el CRA de La Espina con actividades durante todo el curso

Medio centenar de alumnos llenan las aulas del Colegio Rural Agrupado (CRA) Eugenia Astur, con sede en La Espina (Salas) y dos escuelas más en las localidades tinetenses de El Pedregal y Tuña. Unos pueblos en los que la escuela es más que cuna de enseñanza, motor de dinamización social. “Somos cuatro madres las que estamos al frente, con nuestros hijos en el colegio de La Espina. Pero las actividades llegan a las tres sedes”, explica Belén Requejo, secretaria de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del Eugenia Astur.

“Normalmente hacemos algún taller de postales y, en primavera, hacemos una ruta cicloturista por La Espina para familias y vecinos que quieran apuntarse. Una ruta larga y una corta, y merendamos juntos. Ahora también tenemos celebración de Carnaval, y una comida de convivencia a final de curso, a la que también puede ir todo el mundo, socios y no socios”, añade Requejo. La AMPA implica así a la comunidad, en unas actividades de hermanamiento que, generalmente, se desarrollan en La Espina. “Siempre se pone transporte para que pueda venir el alumnado de otras sedes”, aclaran. 

La organización de las actividades extraescolares -patinaje, baile e informática- también recae en la AMPA, de la que “todas las familias son socias”. Además, el colectivo canaliza reivindicaciones como la mejora que reclaman para el colegio de El Pedregal. “Ahora mismo tenemos un problema con este colegio. Los niños están sin calefacción, desde que se estropeó a principios de enero. Tienen tres estufas de gas”, asegura Requejo sobre el centro, en términos municipales de Tineo. “Además, no tienen patio y les entra agua. Llevamos años denunciándolo”, añade.