Cuarenta años de acelerón en La Espina: la escudería salense Orbayu Competición

La pasión por los coches, por sus sistemas de funcionamiento y sus posibilidades técnicas, así como la maestría de los pilotos y copilotos, supone el motor de Orbayu Competición. Es una de las tres escuderías de las que presume Salas, creada en octubre de 1980 en La Espina. Con 27 licencias la pasada temporada, Orbayu organiza competiciones y crea escuela.

"Nací en La Espina y aquí, desde que eres un crío, ves coches todo el día pasando por delante de casa. Veía el autocross por aquel entonces y, claro, acabé corriendo. En 2014 cogí la presidencia de la escudería, y en 2015 organizamos el primer rallysprint", explica Iván Álvarez, prejubilado de la mina, actualmente al frente de la escudería. A sus 53 años, recuerda su debut en el Autocross de La Espina. "Fue a principios de los noventa. Luego, en 2003 corrí mi primer rallye. La última participación fue en 2021 en Cangas del Narcea. Ahora, compagino la afición al automovilismo con el esquí y el ciclismo. Son mis pasiones", dice

A los retos ya está acostumbrado. "El año pasado tuvimos 27 pilotos que corrieron con nosotros en diferentes modalidades. Alguno venía de Galicia. Este año tenemos un amigo de Murcia que quiere estar aquí. Pero, sobre todo, son gente de la zona", subraya Álvarez sobre un deporte que ve "muy caro". "Todos los que estamos en el mundillo lo sabemos", apunta . Correr en el Rallye de Tineo puede rondar los mil euros. Organizar el de La Espina sale por 25.000 euros.

Fue en 2017 cuando la escudería impulsó su "buque insignia": el Rallye de Velocidad de La Espina. Segunda prueba del campeonato regional, tras el Rallye de Tineo, con la que Orbayu quiso dar el salto. "Coincidió ese año que la comisión de fiestas de La Espina se disolvía y, entonces, cogimos el relevo. A día de hoy, organizamos las fiestas del pueblo, a principios de julio, y con lo que sacamos para ellas también contribuimos al rallye. El pasado año fueron 106 los inscritos, cuando en La Espina la población no llega a 400 habitantes", destaca Álvarez. La lotería y los patrocinadores son esenciales.

"Tenemos un circuito de autocross en desuso. La idea es adecuarlo y que la gente pueda venir a probar su coche. Tiene 1,2 kilómetros y podría ser una manera de sacarle rendimiento y generar recursos para la escudería", proyecta Álvarez. Orbayu cuenta también con un circuito de karting y la organización de dos ediciones de Classic Rallye, dos rallySprint y cinco ediciones de 100 Millas.

El 2 y 3 de marzo, La Espina acogerá el tercer curso de copilotos. "David Vázquez lleva tres años viniendo a dar el cursillo y Adrián Pérez se sumó el pasado. El piloto les canta las notas, ellos apuntan y se hace una simulación del tramo cronometrado. Los dos mejores corren una carrera, uno con Rodolfo Suárez y el otro con Adrián Méndez", explica Álvarez.

No hay aún mujeres piloto en Orbayu, pero las jóvenes ya se han hecho con el asiento de al lado. "El año pasado fue elegida de las mejores una chica de la zona, Nerea, y un corredor de Candás se puso en contacto con ella para el campeonato de Asturias", concluye con orgullo el presidente de la escudería.