El bar más sostenible de España está en la Pola y triunfa en un "Territorio circular"

Alberto Díaz, propietario de Patio de Butacas, ganó la fase nacional del premio Torres Brandy Zero Challenge gracias al proyecto centrado en los productos de proximidad con el que representará a España en la gran final de Barcelona

Alberto Díaz, elaborando un cóctel en su establecimiento.

Alberto Díaz, elaborando un cóctel en su establecimiento.

Lucía Rodríguez

Un propuesta "altamente creativa" y con "un enfoque circular en la sostenibilidad" llevó al proyecto del local Patio de Butacas, en Pola de Siero, a alzarse con la victoria en la final nacional de la Torres Brandy Zero Challenge. Por tanto, participará representando a España en el certamen internacional que tendrá lugar en Barcelona el próximo 20 de marzo.

La propuesta, encabezada por Alberto Díaz y Tania López, pero en la que participó todo el equipo del establecimiento, defiende un enfoque global. "Se trata de cuatro pasos que enlazan de tal manera unos con otros que acaban convirtiéndose en un círculo", explica López. Muchos vecinos de La Pola saben que en el local, poseen un huerto propio, a través del cual cultivan su propia materia prima. "Todo aquello que no podemos obtener por nosotros mismos, lo logramos a través de productores locales y de nuestro entorno", añade.

Es por ello que los 30.000 euros del premio irán destinados, en primer lugar, a "ampliar los huertos que ya tenemos y crear otros nuevos de carácter hidropónico", indica la hostelera. Estos son cultivos que se gestionan única y exclusivamente con agua, sin necesidad de terreno. "Conseguimos menor desgaste de la tierra, menos plagas y un menor uso de pesticidas", detalla.

Pero la iniciativa consta de tres pasos más. "El proyecto continúa con la gestión de excedentes de nuestros proveedores, poniendo a su disposición nuestra web para su venta, y pasa por la formación constante en una escuela para hosteleros y proveedores en materia de sostenibilidad", detalla Alberto Díaz. "Disponemos de un espacio en nuestro bar que podría ser un aula, pero nos faltan los medios necesarios para llevarlo a cabo", sostiene Tania López.

"El plan finaliza en el propio local, destinando un espacio como zona de compostaje y utilizando el desperdicio orgánico para elaborar compost que vuelve directamente al primer paso: nuestros huertos", explica Díaz. De ahí surge, además, el nombre del proyecto, aunando productos y proveedores locales con este puzzle de pasos.

Patio de Butacas tendrá que competir con los proyectos de los representantes de Reino Unido, México, EE UU, Canadá, Finlandia, Estonia, Lituania y Emiratos Árabes. Las expectativas son buenas. "Nosotros iremos a la final internacional con el mismo proyecto que llevamos defendiendo a lo largo de todas las fases del certamen, porque es el que define nuestra esencia y nos representa", concluyen los hosteleros de la Pola.

La competición premia la capacidad de los participantes para gestionar su establecimiento con el menor impacto ambiental y crear un cóctel innovador que refleje su compromiso con la sostenibilidad.