Opinión | El Paragües

Vicente A. Montes álvarez

La incubadora

Minusvalorar a otros considerándose superiores por capacidades, recursos o progreso puede producir un buen refresco. El señor Ministro de Transportes confundió a Milei con "mi ley" y no dudó en valorar despectivamente al presidente argentino lanzando suspicacias sobre sus hábitos y cultura. Y la respuesta la sabemos. Aunque el sentido de la diplomacia en ambas direcciones ya brillaba por su ausencia, crisis diplomática y retirada de embajadora. Si esa fractura institucional afecta a empresas y españoles en Argentina no tiene importancia. Lo importante es ver si se pueden arañar tres votos para las Europeas e intentar el cansino discurso sobre la extrema derecha. La experiencia y la cultura son soporte de nuestro futuro. Cuando se cree estar en un nivel cultural superior se está abocado al fracaso. A mí ya me paso. Hace años supe que en el antiguo Egipto tenían incubadoras para aves. Claro que yo pensaba que nuestra cultura había superado con creces a la egipcia y solo por curiosidad intenté probar su experiencia. El invento consistía en un recipiente cerámico que se introducía entre estiércol, que al fermentar aportaban el calor necesario para nacer las aves. Probé, en una "parva de cuchu de oveya". Introduje un recipiente de plástico perfectamente sellado, con un tubo de respiradero y con huevos fecundados. Fui a los veintiún días. Los huevos eran negros. Partí uno a ver qué había pasado y estaba cocido. ¡Mecachis! Estaba convencido de que mi tecnología y conocimientos estaban muy por encima de los egipcios. Pero lo suyo era lo suyo, y lo que a mí me parecía fácil y rudimentario tenía una enorme complejidad, no pudiendo minusvalorar su alto logro. Yo creo que también a quienes se colocaron por encima del que consideraron piltrafilla sin respetar su posición, aunque no se comparta, se les están poniendo negros y les están cociendo los huevos.