Oviedo, J. MORÁN

El obispo prelado del Opus Dei, Javier Echevarría, alentó ayer a los creyentes a la «santa rebeldía», según expresión muy querida por el fundador de la Obra, San Josemaría Escrivá. Una rebeldía basada en «la fe, la esperanza y el amor» y que procede de que «los cristianos somos grandes defensores de la libertad, contra toda clase de esclavitudes y totalitarismos».

Echevarría, de 76 años, líder espiritual de una institución con 87.000 miembros en el mundo, fue invitado por el arzobispo Carlos Osoro a visitar Asturias con motivo del año santo de la Cruz y, también, a presidir la misa de jubileo que ayer congregó a más de 2.500 personas en la Catedral, entre las que se contaban numerosas familias, niños y jóvenes.

En su homilía, el prelado del Opus Dei agradeció la invitación de Osoro -«¿cómo pagar tanta bondad y tanto afecto?»- y pidió a sus seguidores: «Corresponded al celo pastoral del arzobispo Osoro». Tras reflexionar acerca de que «lo común entre el presente y la época de las cruces de la Victoria y de los Ángeles es el deber de defender la fe cristiana», Javier Echevarría citó a Benedicto XVI para lamentar «la tentación del relativismo: el Evangelio como una doctrina entre otras; Jesucristo como un personaje más de la historia». El prelado se refirió de nuevo al Papa para asegurar que Jesús «no fue ni siquiera un gran revolucionario, y el cristianismo no traía un mensaje socio-revolucionario, sino el encuentro con el Señor». Tras destacar la dimensión vertical de la fe, Echevarría incidió, no obstante, en la horizontal, «en el espíritu solidario y en la preocupación por los demás», mediante una «gran esperanza que sólo puede ser Dios».

Junto a Echevarría concelebraron ayer Carlos Osoro, Raúl Berzosa, obispo auxiliar, y Rafael Llano Cifuentes, originario de Ribadesella, miembro de la Obra y obispo de Nueva Friburgo (Brasil). También concelebraron el vicario general del Opus, Fernando Ocáriz, el vicario en España, Ramón Herrando, y el vicario para Asturias, Ángel Lasheras. Canónigos del cabildo y sacerdotes de la Prelatura -son 17 en Asturias- se unieron a la celebración. El Opus Dei cuenta en el Principado con 800 miembros, más colaboradores, hasta sumar unos 2.000 fieles.

Al comienzo de la misa, Osoro se refirió a ellos para elogiar la presencia en Asturias del Opus Dei, con «su aportación a un nuevo humanismo verdadero, basado en una vida ordenada a la verdad, un comportamiento moral y un sentido de la vida humana». Destacó, asimismo, su «amor y pasión por la Iglesia de Cristo, por la familia, por las vocaciones y por el trabajo bien realizado». Una ovación de los asistentes agradeció estas palabras. Otro arzobispo de Oviedo, Francisco Javier Lauzurica Torralva, había sido el prologuista del libro más famoso de San Josemaría, «Camino».