La rapidez de los medios digitales no deja tiempo al cerebro para procesar sentimientos como la admiración o la compasión ante el sufrimiento psicológico ajeno, según un estudio llevado a cabo por neurocientíficos estadounidenses. Los seres humanos pueden procesar la información muy deprisa y pueden responder en fracciones de segundo a signos de dolor físico en los demás, pero la admiración y la compasión, dos de las emociones que definen a la humanidad, requieren mucho más tiempo, afirman. Es la conclusión de los científicos de la University of Southern California, que publican su trabajo en «Proceedings of the National Academy of Sciences».