Londres
Un tribunal de Dublín juzga a Maeliosa O'Hauallachain, un cura irlandés acusado de agredir sexualmente a una niña de 14 años, entre 1981 y 1982. La mujer, que en la actualidad tiene 42 años, declaró ante el juez que el sacerdote, que ha negado todos los cargos, abusó de ella en tres ocasiones y que tras cada agresión le obligaba a rezar diez avemarías a modo de penitencia por sus actos impuros.
La víctima, según informa el periódico británico «The Independent», asegura que el padre O'Hauallachain la manipuló para que no explicara nada y le llevó a un estado de ansiedad que la empujó al alcohol a los 15 años. La entonces adolescente solía embadurnarse de crema antiséptica para eliminar su olor corporal. «Me sentía fatal, sucia. Me sentía maloliente», contó.
La primera agresión se produjo, según la mujer, un domingo, cuando iba a confesarse. El sacerdote la hizo entrar al confesionario, la sentó en sus rodillas, la besó en los labios y, con la puerta cerrada, empezó a tocarle los senos. «Puso mi mano en el bolsillo de su hábito y me hizo juguetear con su pene», declaró la supuesta víctima. Los abusos denunciados por la mujer se repitieron otras dos veces, la última en agosto de 1982.
