São Paulo

Los jóvenes británicos Leon Villalba y Timothy Kennely, integrantes de la banda de rock «After Death», murieron ayer ahogados en una playa del sudeste de Brasil, informaron fuentes oficiales. La banda se encontraba en Brasil en medio de una gira con la que recorrían el país presentando sus últimas canciones. La banda tenía conquistado a un amplio sector del rock y una muy fiel familia de seguidores juveniles que admiran su contundencia sonora y su energía tanto en los escenarios como en el mundo del disco.

Ahora todo se apaga con la desaparición de estos dos jóvenes que tenían gran importancia en la banda y su sonido.

El Cuerpo de Bomberos de Aracaju, en el Estado de Bahía, informó que uno de los jóvenes había entrado en el mar en la playa de Atalaia cuando comenzó a tener problemas y el otro acudió en su ayuda, pero ambos perdieron la vida.

El cuerpo de Villalba, guitarrista de 21 años, ya fue recuperado, mientras se seguía la búsqueda del de Kennely, bajista del grupo, de 18 años.

Según los Bomberos, en el momento de incidente no se daban condiciones adversas que hicieran peligroso el baño en la playa.

La banda tenía programadas actuaciones por diversos estados de Brasil hasta el próximo 21 de febrero.

Desde que se conoció la noticia, el mundo de la música, y más concretamente del rock, se conmocionó ante tan trágico suceso, en el que convergen la juventud de los integrantes fallecidos y la carrera musical que se estaban labrando en estos últimos tiempos. Sin duda, una de sus grandes facetas era el directo, justo lo que les había llevado a hacer esta pequeña gira por Brasil, para disfrutar del escenario junto a sus fans del otro lado de la tierra. Pero la tragedia acechaba al grupo y esas actuaciones.