Grandas de Salime / Oviedo,

Pepe RODRÍGUEZ

José Naveiras, Pepe el Ferreiro, dejó claro ayer que la mayor parte de las piezas del Museo Etnográfico de Grandas de Salime son suyas y, por lo tanto, las reclamará como tales. En opinión del Ferreiro, y de su abogado Ramón Mijares, las cesiones de particulares son a título personal y, al haber pasado ya más de tres años, pertenecen de facto a Naveiras. Por eso han decidido recurrir a la asociación declarativa de dominio para que quede clara esta propiedad.

Para Mijares, la prueba más importante de que la mayoría de los bienes muebles del museo es de su cliente está en el estatuto del consorcio que lo gestiona, donde se cita que la creación del museo es fruto de los esfuerzos de José Navieras. Entienden que es una certeza reconocida por la propia Administración. Así se puso de manifiesto ayer, en una rueda de prensa de la Plataforma de Apoyo a Pepe el Ferreiro, en Grandas.

No obstante, Naveiras dejó claro que podría ceder nuevamente esas piezas al museo en una negociación que incluyera un resarcimiento de la destitución que ha sufrido al frente de la obra de toda su vida. Como respuesta a las acusaciones vertidas sobre su persona desde Cultura, aseguró que no piensa «injuriar» a nadie, «para eso ya hay gente bastante en los altos estamentos. Sólo diré que si en Asturias hubiese gente seria al frente del consorcio, los resultados habrían sido muy diferentes». A su juicio, se le ha despedido porque «es mucho más fácil trabajar con un empleado dócil. Podría añadir que hacía más de cinco años que no respondían a ninguno de mis escritos».

Ironizó sobre la presencia de nueces en el museo, mostrando su satisfacción por haber tenido «la suerte de conocer otros centros etnográficos, de viajar por Europa, donde la gente es normal y entiende las cosas. Yo quería recrear eso. Se recogían las nueces para el desván, pues claro, y se hacía la matanza del gocho, y chorizos, y vino, y se invitaba a los visitantes. Puede darse a entender, por lo que parece, que hacíamos un gran negocio con los chorizos y los jamones... ¿Cuándo entenderán las autoridades lo que es un Museo Etnográfico?».

Mijares aclaró que habían pedido por vía judicial la readmisión de Naveiras en su antiguo puesto. «No es una destitución, sino un despido, pues el contrato era laboral y no de alta dirección», dijo.

Por su parte, el director de Patrimonio, José Luis Vega, anunció ayer que Cultura solicitará una auditoría «que permita certificar el estado real de las cuentas porque el caos administrativo del museo es mayor de lo que previsto». Afirmó que están investigando la existencia de pagos duplicados y negó que anteayer se impidiera al Ferreiro recoger sus objetos personales en el museo. Eva Sánchez, jefa de la Oficina de Gestión de Cultura, admitió el miércoles a LA NUEVA ESPAÑA que no habían dejado recoger a Naveiras los libros, libretas y nóminas, al considerar que no estaba clara la propiedad.