Llega el día D de la era digital

Al Gamoniteiro, todo un símbolo de las comunicaciones asturianas que nació en 1964, le queda un día para cambiar de traje. Dejará su vieja tecnología analógica para pasar a la TDT. Será mañana, a las doce del mediodía, en un acto en la sede de Oviedo de Abertis Telecom. Desde ahí se apagará el reemisor por control remoto. Se despedirán de años de un sistema y recibirá otro, la televisión digital terrestre (TDT), que brinda al telespectador entre 22 y 24 canales. Pueden ser más, pueden sobrepasar el centenar si suman otros muchos servicios que se dan con las plataformas o cadenas de cable de pago.

Aunque el apagón analógico será mañana, ya se lleva tiempo haciendo la transición a la TDT. Esto ha llevado a que los hogares se hayan adaptado a la nueva situación poco a poco, principalmente adquiriendo televisores nuevos con todo dispuesto para la era digital y, en caso contrario, ajustando su televisor con adaptadores que están entre los 30 y los 52 euros, precios con instalación, explica una empleada de la empresa Amirt (aunque hay precios que se salen de esa franja, según calidad, tamaño o la no instalación). Los instaladores en general observan que el usuario se fue surtiendo de los nuevos elementos tecnológicos poco a poco, aunque sí que notaron una mayor venta tras el verano.

Alfonso Álvarez, gerente de negocio en la zona Noroeste de Abertis Telecom, explica a LA NUEVA ESPAÑA que al «apagar el Gamoniteiro se apagan otros muchos reemisores que cuelgan del Gamoniteiro y otros que reciben la señal vía satélite». Álvarez añade que el «Gamoniteiro es particularmente importante, es de los que más cubren en España, aunque tenga muchos reemisores. Por eso la idea de dejarlo hasta el final», matiza. El experto de Abertis entiende que no habrá problemas de sombra: «A diferencia de la tecnología analógica no va a haber sombra. Para las zonas en sombra existe la posibilidad de recibir vía satélite. Con lo cual, todos esos habitantes que tengan problemas pueden solicitar al Principado que se lo active. Por primera vez hay una cobertura del cien por ciento», sentencia. Aunque declara que algunas incidencias que fueron llegando se han ido ajustando: «La TDT está pensaba para que valga la antena antigua. Se trata de ajustar y de tener el descodificador o una tele con el aparato incorporado. Y en zonas rurales se trata de hablar con los antenistas, para solicitar el alta de los equipos satélite».

Asturias está lista, pues, para la entrada en la nueva era, según Abertis Telecom y también las fuentes oficiales del Principado. Las zonas oscuras serán, por tanto, casos aislados que se solucionarán vía satélite. Pero algún problema existe, según una radiografía hecha por LA NUEVA ESPAÑA.

Así, los inconvenientes para recibir la señal de TDT en la comarca del Caudal se concentran en los pueblos de la zona alta de los municipios, aunque la recepción, en términos generales, es buena. En Lena, según explicó el concejal de Urbanismo, Agripino Pérez, las principales carencias se detectan en la zona alta del Huerna, concretamente en Tuiza, con una cobertura deficiente que no permite acceder a una imagen nítida. En Aller, la Federación de Vecinos señala como zonas más conflictivas las localidades de Boo y Bello. En Mieres, las principales quejas se concentran en el valle de San Juan, en las poblaciones que se encuentran por encima de Rioturbio. También hay vecinos que reciben la señal debilitada en el entorno de Ujo, Cardeo, Santa Cruz y Turón. Por su parte, Morcín ha logrado una plena cobertura gracias a su plan piloto, abordado hace ya meses.

En Lastres y otros núcleos de Colunga aún no reciben con nitidez y en algunos casos ni reciben la señal de la TDT. A un día del apagón analógico, en la villa marinera situada en el concejo de Colunga la mayoría de sus vecinos sigue teniendo problemas para recibir la señal de TDT. Aunque tal y como informó ayer el alcalde de Colunga, Rogelio Pando, «los técnicos están trabajando para solucionarlo, los vecinos pueden estar tranquilos, no se quedarán sin señal televisiva», destacó el regidor. Pero el problema no se centra en la villa marinera, ya que otros núcleos del concejo de Colunga también están teniendo problemas para recibir la señal digital. Esta situación aún la sufren los vecinos de las localidades colunguesas de Luces, Loroñe, Puente Agüera y Libardón, que a día de hoy aún no tienen acceso a la TDT. En algunos casos tampoco disponen del servicio de televisión analógico. Esta situación afecta sobre todo a la mayoría de hogares de Lastres y del núcleo de Luces, que desde el pasado 16 de marzo se han quedado sin señal de televisión al adelantarse el apagón analógico en la vecina Cantabria, desde donde recibían señal estas localidades desde hace años, concretamente del repetidor de Peña Cabarga. La situación no afecta a todos los hogares lastrinos, pero sí a la mayoría de ellos. El director general de Modernización, Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Alberto Pérez Cueto, asumió hace unos días en Cangas de Onís que «el problema de Lastres es uno de los más serios que se plantearon en Asturias». Al contrario que en otros puntos de la región, la singularidad de Lastres es que tiene un exceso de señales. Las autoridades locales y regionales aseguran que los problemas están solucionándose con el fin de poder antenizar correctamente esta zona del concejo de Colunga. El problema de la orografía lastrina y no disponer de un repetidor en la villa son algunas de las causas que explican que la señal de la TDT aún no llegue a todos los hogares de Colunga.

En la zona costera del Occidente, Valdés es uno de los municipios con más problemas de recepción de señal limpia. Aunque la cobertura, según los datos técnicos, es casi total, los problemas de interferencias persisten en la capital del concejo, Luarca, y, en concreto, en el repetidor de la Funiar. La Dirección General de Modernización recibe desde hace poco más de un mes las quejas que los vecinos trasladan al Ayuntamiento, pero los fallos en la recepción de la señal, en distintos horarios y afectando a distintas cadenas, continúan.

En Avilés, según algunos antenistas, los problemas se acumulaban en el extrarradio, aunque aquí el riesgo de quedarse en sombra tiene más que ver con un alto porcentaje de hogares que aún no han instalado los adaptadores.

Y en el entorno de Fresnedo, en Laviana, y de El Nadal y La Fresnosa, en Langreo, persisten los problemas en la recepción. A esto se une que en el alto Nalón, en los concejos de Sobrescobio y Caso, el PP denunció deficiencias. En el municipio coyán se solucionó provisionalmente la ausencia de señal en la zona de Ladines ante la necesidad de cambiar la ubicación del repetidor de Soto de Agues, que se llevará a cabo en un mes. Desde Caso se indicó que se ha hecho todo lo posible para solucionar los problemas. Paco Iglesias, antenista de Laviana, apunta que no se conocerán las zonas de sombra hasta el apagón, ya que son numerosos los vecinos que no se han ocupado de comprobar si sus equipos están adecuados.