Londres
La mujer iraní condenada a lapidación por adulterio ha acusado al Gobierno de Teherán de mentir para poder ejecutarla en secreto. Las autoridades iraníes afirman que Sakineh Mohammadi Ashtiani, de 43 años, ha sido condenada por intentar asesinar a su marido, además de adulterio, pero Ashtiani negó esa acusación en declaraciones enviadas al diario británico «The Guardian», a través de una tercera persona.
«Mienten. Están avergonzados por la atención internacional que se ha dado a mi caso y llevan a cabo maniobras de distracción y tratan de confundir a los medios de comunicación para poder matarme en secreto», asegura. «Me declararon culpable de adulterio, pero me absolvieron del cargo de asesinato. El hombre que mató a mi marido fue identificado y encarcelado, pero no ha sido condenado a muerte», añadió. Ese hombre no corre peligro de ejecución porque el hijo de Mohammadi Ashtiani le perdonó. Ella en cambio fue condenada a muerte tras ser acusada de adulterio. «Es porque soy una mujer y creen que pueden hacer lo que quieran con las mujeres en este país», denuncia.
