Oviedo, P. R.

La Consejería de Bienestar Social viene promoviendo desde el pasado año una serie de programas de capacitación parental, orientación familiar, puntos de encuentro y centros de día dirigidos a favorecer el acogimiento familiar para los menores tutelados por el Principado. Asturias tenía acogidos, a 31 de diciembre de 2009, 569 menores, de los que 407 -269 varones y 138 mujeres- se mantenían alojados en sus centros, según fuentes de la Consejería.

Estos planes, que impulsa el Instituto de la Infancia, dirigido por Gloria Fernández, trata de desalojar de los centros tutelados a los menores. «La institucionalización de un niño es siempre el último paso», suele decir Gloria Fernández.

Los programas del Principado van en la línea de lo que propone el Senado, que prepara la futura ley de Adopción Nacional y Acogimiento Familiar. Los parlamentarios creen que los menores, sobre todo hasta los 6 años, no deben vivir en centros institucionales sino con familias de acogida. España tiene entre 35.000 y 40.000 menores en centros tutelados y alrededor del 25% no ha cumplido todavía los 6 años.

Los programas puestos en marcha por la Consejería asturiana evitaron que, en 2009, tres mil menores ingresaran en el sistema de protección y les permitieran seguir viviendo con sus familias. Por otra parte, 732 participaron en 2009 en los diferentes programas y modalidades de acogimiento y más de 600 fueron acogidos por sus familiares. «Nuestro empeño es crear una cultura del acogimiento, porque sólo incrementando el número de familias acogedoras podremos garantizar el derecho de los niños a vivir en una familia cuando sus padres biológicos no pueden cumplir ese papel», declaraba la consejera de Bienestar, Noemí Martín, el pasado mes de mayo, con motivo del «Día internacional de las familias».

Bienestar organizó a propósito de esa celebración unas jornadas en las que se presentaron los diferentes programas de acogimiento familiar que se están desarrollando en Asturias, además de las experiencias en este campo, tanto en Asturias como de Castilla y León, País Vasco y Cantabria.

Una de las innovaciones del proyecto del Senado es la introducción de las familias profesionales de acogida, un modelo que funciona en el mundo anglosajón y que suele estar formado por parejas de médicos, psicólogos, pedagogos, asistentes sociales y otras profesiones relacionadas con la infancia. Estas familias cobran una cantidad por cada menor acogido. Algunas comunidades ya pagan pequeñas cantidades a familias de acogida.