Estambul, Agencias
La polémica por las declaraciones del escritor Fernando Sánchez Dragó ha llegado hasta la Feria del Libro de Estambul. Este año España es el país invitado y ayer la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, inauguró su 39.ª edición. Sin referirse explícitamente al escritor, proclamó durante el acto que «la literatura no es una coartada». Se refería al pasaje del libro «Dios los cría...» en el que Sánchez Dragó cuenta que, en 1967, mantuvo relaciones sexuales con dos «zorritas» japonesas de 13 años, aunque luego matizó que era «ficción».
«Las obligaciones y los valores de un escritor no son distintos de los de cualquier otro miembro de la sociedad. El oficio de literato no es un eximente para quienes, con sus palabras, por muy hábilmente que estén ordenadas, ofenden, desprecian, se saltan las reglas de convivencia y pisotean, peligrosamente, valores como la igualdad o la no discriminación», declaró la Ministra. Más tarde, con la prensa y refiriéndose abiertamente al escritor, dijo no compartir «en absoluto esa inocencia de las palabras de la que hablan el señor Sánchez Dragó y la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre».
Hoy, Sánchez Dragó participará en una mesa redonda en la feria turca. «Si hubiera habido más tiempo, el Ministerio habría considerado retirar la invitación» al escritor, reconoció González-Sinde.
La ministra de Sanidad, Leire Pajín, también tildó ayer, durante un viaje oficial a Sevilla, de «absolutamente inaceptable» la actitud del autor. «Lamentablemente no sorprende y no es la primera vez que hace deliberaciones de estas características», señaló. Ninguna expresión artística, opinó, «puede justificar» el comportamiento del escritor madrileño.
