Las colecciones Resort son un buen campo de pruebas para hacerse una idea de lo que vendrá en los próximos meses. A tenor de las propuestas presentadas por firmas como Altuzarra o la mismísima Óscar de la Renta, parece que los excesos se baten en retirada y el minimalismo vuelve a tomar las pasarelas, años después de causar una auténtica revolución en los códigos de vestimenta.
Aunque conviene matizar que, más que de minimalismo, los creadores hablan de "mínimos estéticos" y hacen algo así como una revisión del "menos es más" que tanto juego ha dado en los últimos años, y que tantos desmanes visuales ha provocado.
Porque claro, menos es más siempre que no suponga caer en la sosería o en el error de creer que por el mero hecho de ponerse un vestido liso como una tabla e ir sin complementos ya se ha llegado al colmo de la elegancia y el estilo.
Una de las mejores guías para lucir esa elegancia carente de aditamentos es fijarse en esos vestidos de cortes certeros que propone Altuzarra, alegrados con tejidos que juegan a las formas geométricas.
La firma Óscar de la Renta prefiere jugar con los motivos florales y emplear mucho el blanco, en vestidos de cóctel que tapan los pies y que sólo necesitan unos buenos pendientes como acompañantes.
Nicolás Gesquière, en la colección Resort 2016 para Louis Vuitton, utiliza el cuero y las cremalleras a la vista, cruces a la altura del abdomen que sirven de adorno, maxifaldas, chaquetas cortas al estilo Mad Max o los hot pants en sus más variadas versiones.
Sin duda, el cambio en los cánones estéticos está servido, porque las formas se alargan y se hacen más generosas. Las minis y los tops escuetos están a punto de pasar a mejor vida por una larga temporada.
África cabe en la terraza.
La decoración de estilo rústico no se agota en el chic francés ni en el encanto del gustaviano sueco. Existe una forma de decorar, muy recomendable para los exteriores, influenciada por el estilo inglés de casas de campo, que a su vez se inspira en África. Para conseguir una ambientación adecuada merece la pena echar mano de falsas piezas vintage, de esas que se encuentran en tiendas de decoración a bajo precio. Todo lo que recuerde a esculturas o máscaras africanas es un acierto.
Las slippers, ese regio y plano calzado.
En esta primavera de contrastes los taconazos de vértigo conviven con slippers completamente planas, de punta cuadrada o afilada, muy favorecedoras porque alargan la pierna y perfectas para la oficina. Este tipo de calzado se ha empeñado en tomar el relevo de las bailarinas de toda la vida, y va camino de conseguirlo. Una de las propuestas más interesantes la firma Pretty Loafers, que enseña ya un avance de su colección de invierno con colores vivos, como el rojo y bordados en dorado.
Slippers rojas bordadas en dorado.
