Se suele decir que todo español lleva dentro un seleccionador de fútbol y un presidente del gobierno. En la vertiente política, a lo más que llega la inmensa mayoría es a presidir su comunidad de vecinos, pero en lo deportivo, ser seleccionador, o el manager del equipo favorito de cada uno, fue posible durante unos años, gracias a un videojuego ya mítico, que se convertiría en un fenómeno social y cuya mera mención dibuja sonrisas y anima conversaciones: PC Fútbol. El título de una saga de cuyo lanzamiento se cumplen ahora 25 años.
Esta obra maestra del videojuego español fue desarrollada por la extinta Dinamic, que en ese año de 1992 lanzó un juego llamado "Simulador profesional de fútbol", que sería el germen de PC Fútbol. De hecho, cuando en el arranque de la temporada 1993-1994 salió el primer PC Fútbol, con la desarrolladora ya convertida en Dinamic Multimedia, los creadores le añadieron tras el título un expresivo "2.0" para remarcar que se trataba de una evolución del título anterior.
El impacto de aquella saga desbordó a los usuarios tradicionales de videojuegos, alcanzado a nichos insospechados de mercado. "Marcó tendencia en muchos aspectos, tanto a nivel de desarrollo como de distribución, pues se vendía en los quioscos con muy buenos resultados. Un modelo que funcionó muy bien durante un tiempo", explica Alejandro González, de la desarrolladora asturiana de videojuegos Milkstone Studios.
González destaca el carácter generacional del "fenómeno PC Fútbol", aunque también cómo la aplicación fue capaz de integrar a gente ajena al mundo de los ordenadores: "En las primeras versiones, jugaba con mi padre. Yo las tuve todas, recuerdo haber ganado la Liga con el Oviedo. Me lo pasaba muy bien".
Complejo y sencillo a un tiempo, divertido, tremendamente adictivo y con una rejugabilidad máxima, el PC Fútbol era tanto un entretenimiento individual como una buena alternativa de ocio en grupo, en virtud a su ágil dinámica de turnos. "El jugador devoraba el PC Fútbol, le sacaba hasta la última gota. Fue un producto que inauguró un tipo de juego que no estaba muy desarrollado en aquella época, como era el manager de fútbol. Dinamic Multimedia dio en el clavo con el tipo de producto y lo lanzó en el momento adecuado", reflexiona Luis Delgado, de Liquid Games.
Una muestra de la trascendencia del juego es que hasta los futbolistas profesionales jugaban con asiduidad. Míchel recuerda en ocasiones cómo jugaba partidas con Luis Enrique, Michael Laudrup y Quique Sánchez Flores cuando coincidieron en la plantilla del Real Madrid, en la temporada 1995-1996. Los cuatro acabaron siendo entrenadores.
Otro que pasó de césped al banquillo fue Juanjo González. En sus tiempos como portero del Real Sporting de Gijón, Juanjo ya ensayaba como manager en su ordenador, por supuesto con PC Fútbol: "El que pasase tantas horas con el juego, tomando las decisiones de un equipo y llevándolo a cumplir los objetivos, supongo que es indicativo de que ya había una vocación ahí". Y el hecho de verse a sí mismo en el juego era una satisfacción: "Para los que no hemos sido grandes estrellas, sólo currantes, era un golpe de autoestima".
Otro sportinguista de aquella época, Arturo Martínez, también guarda buenos recuerdos del PC Fútbol. "Yo no jugaba mucho, aunque compañeros como Monchu, Manjarín o Pablo (Díaz) se llevaban hasta el ordenador a las concentraciones. Pero era algo especial: para mí, salir en los cromos ya era una sorpresa, así que verte en el juego, que la gente te pudiera comprar y llevarte a otro equipo, era increíble. Todavía hace poco un compañero me decía: 'yo te compraba en el PC Fútbol'".
Pero si para estos futbolistas, ya consagrados en la época, el juego era especial, para los jóvenes que soñaban con llegar a ser profesionales lo era aún más. "Era un juego fantástico. Podías gestionarlo todo y llevar a tu equipo a ganar la Champions. Yo nunca fui de jugar mucho con ordenadores, pero a ese sí que jugaba", relata Diego Cervero.
En su caso, obviamente, el Real Oviedo era el equipo preferente, aunque no el único: "Sí, al principio cogía al Oviedo y jugaba con él hasta ganar la Liga y la Champions. Pero después iba a por retos más difíciles: cogía al peor equipo de Segunda B e iba subiéndole de categoría hasta hacerle ganador. Solía coger al San Pedro, de Marbella. Y curiosamente años después acabé jugando contra ese equipo. Yo estaba en el Marbella, y antes del partido recordaba: 'A estos los tenía yo en el PC Fútbol".
