Las ayudas predoctorales "Severo Ochoa" ya no son "tortuga" (como se venían conociendo, de forma irónica, en los últimos años). El Gobierno regional ha conseguido avanzar en la concesión de estos contratos y, por primera vez, este año 25 jóvenes investigadores, de un total de 70 beneficiarios, empezarán sus tesis doctorales con apoyo económico desde el principio.
Esto ha sido gracias a una nueva medida que introdujo la Consejería de Ciencia, Innovación y Universidad, consistente en permitir a estudiantes de último curso de máster y con intención de iniciar la carrera científica solicitar estas becas, que tienen una duración de cuatro años.
"Ha sido un éxito y significa que, por primera vez, tendremos a un alto porcentaje de potenciales beneficiarios que iniciarán su contrato de trabajo al mismo tiempo que empezarán su tesis doctoral, sin tiempos de espera", celebra la directora general de Universidad, Cristina González, que dice más. "La medida fue valorada muy positivamente por los investigadores en formación y por sus directores de tesis, lo cual nos indica que avanzamos en el camino adecuado".
El Principado publicó la resolución provisional del programa Severo Ochoa el pasado mes de junio y ahora se encuentra en proceso de alegaciones. La resolución definitiva, con 70 contratos para los investigadores más excelentes de 207 que se presentaron, saldrá "en fechas similares a las del año pasado", garantiza González. Es decir, próxima al inicio del curso.
"Si todo continúa según lo previsto, habremos conseguido regularizar los tiempos de convocatoria y resolución, de forma que los potenciales solicitantes y beneficiarios puedan programar su plan de investigación de manera muy adecuada y predecible", comenta la directora general. Ese era precisamente uno de los objetivos que se había marcado el equipo de Borja Sánchez desde su llegada al Principado.
Los 70 jóvenes investigadores más excelentes –se evalúa, entre otras cosas, sus expedientes, currículums, el proyecto de la tesis, la trayectoria de sus directores y la actividad investigadora del grupo– son 39 mujeres y 31 hombres. Pertenecen a las áreas de Ciencias (18), Artes y Humanidades (17), Ingeniería y Arquitectura (14), Ciencias Jurídicas y Sociales (12) y Ciencias de la Salud (9).
Cada disciplina dispone de nueve ayudas para las mejores puntuaciones. Esto quiere decir que 45 contratos se reparten por las diferentes áreas de conocimiento y el resto, hasta 70, se destinan a los estudiantes más excelentes independientemente de a qué disciplina pertenezcan. Los datos aportados por la Consejería de Ciencia demuestran que el joven talento destaca en Humanidades, un área que a menudo queda ensombrecida por las ciencias. De hecho, la mejor nota obtenida este año por un alumno es de un 9,1 y corresponde a la rama de Artes y Humanidades.
Las 207 solicitudes, explica Cristina González, fueron enviadas, como en años anteriores, a la Agencia Estatal de Investigación y sus informes han sido remitidos a los aspirantes. "Esto es fundamental para que cada uno pueda conocer su valoración en detalle y hacer alegaciones si lo considera oportuno. Estas valoraciones, además, pueden ser de mucha ayuda para los solicitantes que no resulten beneficiarios y que decidan volver a presentarse a la convocatoria siguiente, pues podrían ver en qué puntos del currículum o del proyecto de tesis hay aspectos mejorables en los que centrarse", comenta la directora general de Universidad. Precisamente, su departamento ya trabaja en la próxima convocatoria, que contará de nuevo con 70 ayudas. A ellas podrán optar investigadores que se quedaron fuera de la presente convocatoria y nuevos estudiantes ya desde el máster.
El Gobierno de Asturias autoriza un gasto de 6,7 millones para la convocatoria anual
El Gobierno de Asturias autorizaba precisamente ayer, en la reunión semanal del Consejo, un gasto de 6.703.889 euros para la convocatoria anual del Programa Severo Ochoa de ayudas para la formación en investigación y docencia. Una aprobación que es el paso previo a poner en marcha la convocatoria de la nueva edición. Las personas beneficiarias se incorporarán, con un contrato de cuatro años, a un departamento de la Universidad de Oviedo o a un centro de investigación ubicado en el Principado para realizar su tesis doctoral. Las becas Severo Ochoa, como explican desde el Principiado, están concebidas para fomentar la formación docente e investigadora de estudiantes de doctorado y según la Consejería "abren una importante vía de retención y atracción de talento". El programa garantiza la selección de los mejores proyectos, ya que "detrás de cada solicitud hay un plan de investigación y un director o directora de tesis, cuyo currículum también puntúa en la baremación, así como la producción científica del grupo al que pertenezca", explican los portavoces oficiales. El Principado ha incrementado el número de contratos anuales de este programa de excelencia, que ha pasado de los 45 beneficiarios de 2016 a los setenta actuales. Este año se mantiene el presupuesto para la contratación de otras setenta personas.
