Informe de EsadeEcPol

Cae la natalidad y las escuelas se vacían: en 2037 tendrán un millón de niños menos

La ESO perderá un 25% de sus estudiantes: de 2,1 millones en 2015 pasará a 1,6 millones, según el último estudio de EsadeEcPol

Unos niños hacen deporte en un colegio de Madrid.

Unos niños hacen deporte en un colegio de Madrid. / David Castro

Olga Pereda

Como consecuencia de la caída de la natalidad, el sistema educativo español pasará de absorber 7,5 millones de escolares de infantil, primaria y secundaria en 2013 a 6,5 millones en 2037. Un descenso de un millón de alumnos. Esta es la demoledora advertencia que hace el centro de políticas económicas EsadeEcPol en su último informe, titulado 'Las escuelas se están quedando sin niños: una oportunidad para transformar el sistema educativo'.

La ESO perderá un 25% de sus estudiantes: de 2,1 millones en 2015 pasará a 1,6 millones en 2037

Si cada vez nacen menos niños y niñas ¿qué va a pasar con los colegios? Contestar esta pregunta es uno de los retos del sistema educativo español. Lo mismo sucede en Italia, Portugal y Grecia. Francia y EEUU se salvan porque su índice de natalidad es más elevado.

Y el descenso ya se nota. Catalunya ha empezado este curso con 20.000 alumnos menos en infantil y primaria.

Para las arcas públicas, menos alumnos no significa menos gasto educativo. Al contrario

Desde 2015 a 2037, la ESO habrá perdido el 25% de su alumnado en España. Si en 2015 había 2,1 millones de estudiantes, en 2037 habrá 1,6 millones. La etapa de primaria encontrará antes su mínimo: en 2032 la cifra de niños será de 2,4 millones, lejos de los tres millones de 2017. La inmigración amortigua un poco el golpe, pero no lo suficiente para compensar la caída. Sin los hijos de los migrantes, el panorama sería todavía más dramático.

El desplome se cebará en los municipios menos poblados y no tanto en grandes ciudades como Barcelona o Madrid

Precedente en los 90

No es la primera vez que el descenso de la natalidad sacude el sistema educativo. Ya sucedió algo parecido en los años 90 del siglo XX, cuando los hijos del 'baby boom' abandonaron la escuela. En aquella ocasión, sin embargo, el impacto fue más suave. Los expertos en políticas educativas piden al Gobierno y las comunidades autónomas que actúen ya para rediseñar la red escolar y evitar un colapso.

“Hay dos opciones. Una es no hacer nada y ver que dentro de unos años habrá muchísimas escuelas con muy poco alumnado. La otra alternativa es empezar a tomar medidas desde ya”

— Lucas Gortazar, investigador de EsadeEcPol

Las soluciones, apuntadas en el informe de Esade y corroboradas por otros expertos en educación, pasan por cerrar escuelas muy pequeñas, implantar una buena red de transporte escolar para trasladar a estudiantes, reducir el número de alumnos por docente, evitar la segregación escolar y apostar tanto por la educación de 0-3 años como por la Formación Profesional (FP).

"Hay dos opciones. Una es no hacer nada y ver que dentro de unos años habrá muchísimas escuelas con muy poco alumnado. La otra alternativa es empezar a tomar medidas desde ya", resume Lucas Gortazar, coautor del informe y especialista en educación y política social.

Menos alumnos, más gasto

Entre 2013 (máximo histórico de alumnos) y 2023, España ha perdido 450.000 niños menores de 16 años. En 2037, la cifra habrá sobrepasado el millón. Para las arcas públicas, menos alumnos no significa menos gasto educativo. Al contrario. El gasto por alumno se incrementa dado que todas las estructuras (colegios, docentes y sistema en general) se mantienen igual.

Recogiendo datos del Instituto Nacional de Estadística, el análisis de Esade sostiene que la caída de la población en edad estudiantil es un hecho desde hace una década. Alcanzará su máximo en 2034, con 6,4 millones de niños y niñas entre 0 y 15 años.

En un país donde la natalidad no es una cuestión de Estado y los hijos se ven como una carga dado que las políticas para conciliar son prácticamente inexistentes, es muy difícil que la tasa de fertilidad (cantidad media de hijos por mujer) supere la cifra de dos, condición necesaria para asegurar un remplazo demográfico. "La realidad demográfica en Occidente es que ningún país hasta ahora que haya bajado de dos hijos por mujer ha vuelto a superar esta barrera", destaca Gortazar.

"El criterio razonable, prudente y realista de la política educativa debería ser asumir el declive demográfico como una constante, no como una variable", añade el analista.

Impacto desigual

El desplome no afectará a todas los territorios por igual. Se cebará en la España vaciada y en los municipios menos poblados. El informe de Esade pronostica que Zamora, León, Palencia, Albacete y Jaén perderán más de un tercio del volumen de menores de 16 años que tenían en 2013. Barcelona y Madrid perderán menos de un 10%. Y habrá comunidades, como Baleares y Navarra, que no perderán. 

"España tendrá una demanda educativa polarizada. Unos pocos núcleos densamente poblados con perspectivas demográficas menos negativas concentrarán demanda abundante de escolares. Mientras, otros muchos puntos con declive demográfico tendrá demanda escasa", explica Gortazar. Es decir, muchas escuelas con muy pocos niños.

Más gasto

El informe de Esade advierte de que el gasto educativo por alumno va a crecer considerablemente por la caída de alumnos. Mantener un colegio con sus servicios básicos: docencia, limpieza, electricidad (entre otros) cuesta lo mismo a las arcas públicas haya 10 alumnos en clase o 20. Un informe elaborado en Euskadi en 2019 concluyó que los centros educativos muy pequeños (entre 50 y 100 alumnos) tienen un gasto medio de 8.558 euros por estudiante mientra que el gasto público por alumno en un centros con más de 400 chavales era de 3.972 euros.

Gortazar recuerda que las escuelas son organismos vivos que requieren de importantes equipos materiales y personales. Docentes, orientadores, psicólogos, profesores de refuerzo y de diferentes asignaturas… Es toda una organización y debe ser fuerte. Lo óptimo, en su opinión, son los centros de dos o tres líneas (clases) por curso.

Un cole con dos alumnas

Estos días, de vuelta al cole, llaman la atención determinados centros. Por ejemplo, el colegio de San Román de Cameros (La Rioja) ha abierto sus puertas con solo dos alumnas: Carla, de 6 años, y Carmen, de 11.

El informe de Esade destaca que seguir como hasta ahora y no realizar ningún cambio en la red escolar tiene el "presunto beneficio" de proteger la España vaciada, "proteger la cercanía a la escuela y a los municipios pequeños". "Pero lo hará al gigantesco coste de producir un sistema más ineficiente y menos equitativo. Se pospondrán decisiones más dramáticas a futuro". Es una estrategia con fecha de caducidad: en última instancia, el proceso de declive demográfico acabará llegando y muchas aulas terminarán por vaciarse.