Hay encrucijadas en la vida en las que uno tiene que dar un paso adelante si no quiere quedarse atrás. Es el caso del Sporting. Los rojiblancos se encuentran en su peor racha en años con ocho partidos sin ganar, cuatros derrotas consecutivas y tres encuentros sin ver puerta. Y aún así, la salvación sigue a tiro de un partido. El partido, el único que importa hoy, es la visita del Atlético de Madrid a un Molinón abarrotado. En otras circunstancias, el conjunto colchonero sería uno de los peores rivales posibles, pero el Sporting se mide al conjunto del Cholo en el mejor momento posible. Lo que no quiere decir, ni mucho menos, que vaya a ser sencillo.

La prioridad de Abelardo es aumentar la seguridad del equipo. A estas alturas ya es evidente que la fórmula anterior no funciona. Como suele suceder en los peores momentos, el Pitu apela a los símbolos y hace sitio a Nacho Cases en el equipo. Las cosas no han ido bien, ni mucho menos, desde que el gijonés comenzó a quedarse fuera de las convocatorias, unas veces por lesión, otras muchas, no.

Con Cases por delante de Sergio y Mascarell, el objetivo es doble. De entrada, mejorar el juego interior del equipo, encontrar salida a la pelota y evitar las filtraciones por dentro. Además, se busca un menor desgaste de Nacho Cases, que no reste frescura a su talento creador.

La otra gran novedad es la vuelta de Pablo Pérez. Un futbolista en el que el técnico no pierde la fe. La banda derecha lleva años siendo un problema mal resuelto. El de la Inmaculada volvió a disfrutar de minutos en Málaga y dejó algunos de su potencial. La principal interrogante se ubica en los laterales. Abelardo ha ensayado todas las opciones, pero Lora e Isma López parecen los favoritos.

El Sporting no está para sutilezas y agradece cualquier signo de debilidad en el rival. Un equipo tan físico, tan intenso, como el Atlético de Madrid puede acusar el esfuerzo realizado el martes en la vuelta de la eliminatoria de Liga de Campeones ante el PSV Eindhoven. En los 120 minutos de juego, los colchoneros recorrieron 158,736 kilómetros. La nómina de bajas la encabeza Godín, lesionado para tres semanas. El central uruguayo tuvo una intervención decisiva en la jugada que terminó con el gol atlético en el último minuto del choque del Calderón. Tampoco estará el habilidoso Carrasco, ni Savic, ni Tiago y Simeone prescinde de Óliver. Mucho talento ausente, que no impedirá que el Atlético presente un equipo competitivo. Jugará el invicto Lucas, que ha ganado los seis partidos disputados en el Atlético.

El Sporting se ha quedado sin margen y necesita con urgencia volver a ganar, sentirse capaz, recuperar la sonrisa. Si lo consigue, tendrá mucho ganado. Al menos una buena dosis de prestigio.