El sportinguismo no necesita informes para saber el peligro de Miguel Ángel Guerrero, la gran amenaza pepinera. El delantero toledano atraviesa el mejor momento de su carrera, consolidado como titular en Primera división (ha jugado los últimos cinco partidos de forma consecutiva) y enrachado ante la portería rival (tres de los cuatro últimos goles del Leganés llevan su firma).

Guerrero es un delantero incómodo para cualquier defensa, a las que no concede ni un segundo de tranquilidad. El Sporting le abrió la puerta del fútbol profesional por sus méritos en el filial y el toledano fue importante en el ascenso rojiblanco y colaboró a la permanencia. Abelardo y Nico Rodríguez, en su intento por mejorar la plantilla, dieron por terminado su ciclo como rojiblanco. Guerrero buscó minutos en un recién ascendido, donde encontró una fuerte competencia. Mañana será la gran amenaza de la que el Sporting tendrá que preocuparse.