El Sporting hará que Andrés Linares Jordán cumpla su sueño. Él no lo sabe todavía, pero el club se ha puesto a disposición de la familia de este cartagenero de diez años para que acuda, cuando lo desee, a El Molinón, premiando así el amor por los colores de un chiquillo cuya historia ha cautivado al sportinguismo. "Mi padre y mi hermana son del Barça. Mi madre, del Madrid. Yo me hice del Sporting porque me salió del corazón", explica Andrés, en conversación con LA NUEVA ESPAÑA, sobre las razones de una pasión sin vínculos ni ascendencia familiar que le relacionen con el club, más allá de "los primeros partidos que recuerdo ver por la tele, cuando Carlos Castro empezaba a jugar en el primer equipo".
"Creo que no vamos a subir este año. Quizá, el que viene", plantea, de primeras, el pequeño Andrés, a quien no le ciega la pasión. Le sobra desparpajo y conocimientos sobre el Sporting. "Es una pena, porque tenemos al filial líder en Segunda B y merecen ascender, pero para eso el primer equipo tenía que tirar para arriba, ¡claro!", comenta antes de subrayar el potencial de Claudio, artillero del Sporting B, acreditando que habla con conocimiento. "Carlos Castro también es un buen jugador, ¡eh!, lo que pasa es que es un delantero que cuando quiere, mete goles, y cuando no?", desliza, puntualizando que el de Ujo es uno de sus jugadores que más le gustan. Y es que es un murciano que, ante todo, defiende a los de casa. "Tenemos bastante buena cantera en Mareo, pero si el entrenador no les da oportunidades, se van a enfadar y terminarán marchando todos", sentencia. Andrés también juega al fútbol. Es portero, en el equipo de Primera alevín del club murciano El Progreso. "Me comparan con Ter Stegen (guardameta del Barça). Soy bueno con las dos piernas, ágil bajo palos y encima, rubio, como él", comenta, entre risas. La temporada pasada militaba en el Torre-Pacheco, conjunto afiliado con el Villarreal. El estar vinculado al submarino amarillo no le hizo cambiar sus prioridades en sus gustos futbolísticos. "Ficharía por el Sporting ahora mismo y jugaría en el primer equipo incluso si no me pagaran. Por aquí dicen que soy bueno", desliza el cartagenero. Andrés Linares animó al Sporting en su visita a Lorca, pero no fue la primera vez que vio al equipo en directo esta temporada. "Estuve también cuando jugaron en Albacete", descubre. En cualquier caso, su paso por el Artés Carrasco, además de lanzarle a la fama al descubrir su incondicional sportinguismo ante los micrófonos de Cope Asturias, lo recordará para siempre por el regalo que recibió. "Quería la camiseta de Sergio, pero no pudo ser y Santos me dio la suya. La tengo en mi habitación, como un trofeo. De ahí no va a salir, no vaya a ser que la lleve a algún lado y la pierda", asegura. El uruguayo, "una incorporación oportuna e interesante, aunque haya llegado cedido", comenta, ha pasado a ser uno de sus futbolistas preferidos. "Me gustan Lora, por su trayectoria; Sergio, porque distribuye el juego; Hernán, al que se le ve talento aunque haya jugado poco todavía; Rubén García, por su técnica y Carmona, que pasó por el Cartagena y tiene mucha calidad", detalla.
Intenta ver los partidos del Sporting por televisión, o algún resumen de los que circulan por internet, y se imagina cómo será vivirlo desde una de las butacas del municipal gijonés. "El ambiente tiene que ser espectacular, mejor que el del Camp Nou o el Bernabeu. El Barcelona y el Madrid tienen más gente, pero menos ambiente que El Molinón", afirma sin saber todavía lo que le espera.
"Le digo ya que este verano voy seguro a Gijón, al Campus de Mareo", concluye Andrés.
