El TAD (Tribunal Administrativo del Deporte) absuelve al Sporting del pago de una multa de 18.000 euros por gritos racistas en El Molinón en el partido ante el Nástic de Tarragona, que tuvo lugar el 28 de enero de este mismo año. El Tribunal destaca que el club rojiblanco aplicó los protocoles de prevención y contribuyó a identificar al autor de los cánticos. De esta manera el TAD admite el recurso presentado por el conjunto rojiblanco tras haber sido sancionado por el Comité de Competición, y ratificar después el Comité de Apelación la multa.
Fue la Liga la que denunció cánticos en El Molinón en el fondo sur que decían: "No queremos jugadores, jugadores de color, los queremos de Mareo y orgullosos de Gijón". Esa denuncia se produjo tras difundirse un vídeo en las redes sociales, ya que en primera instancia no se reflejó en el acta arbitral ni en el del coordinador de seguridad. De ahí que el TAD exculpe al club en un expediente: "El Sporting inicialmente cumplió con los protocolos de seguridad y medidas de prevención exigidas, y que con posterioridad a que se produjeran los hechos y se tomara conocimiento de los mismos se desplegó una diligente actividad investigadora, de identificación y depuración de responsabilidades de autor de los cánticos y de su difusión en las redes sociales".
La resolución del Tribunal Administrativo del Deporte es definitiva por la vía administrativa, y contra la misma solo se puede interponer un recurso en Madrid el Juzgado de lo Central Contencioso-Administrativo.
El Sporting, una vez se hizo público la denuncia el pasado mes de enero, tardó pocas horas en anunciar que el autor de los cánticos iba a ser sancionado tras haber sido identificado. Además el club rojiblanco defendió a su afición como "modélica". "El Sporting siempre ha mostrado su rechazo ante cualquier ofensa, falta de respeto o muestra de intolerancia", indicó el club rojiblanco mediante un comunicado, en el que también apuntó que seguirá "luchando contra cualquier acto que ponga en duda el buen nombre de unaafición que pasa por ser modélica y cuyo proceder tanto en El Molinón como en sus continuos desplazamientos es reconocida públicamente como intachable".
