"Tenemos toda la motivación posible. Quedan 13 jornadas por delante, representamos a un club histórico". Molinero, que volvió a jugar de titular en Soria, busca lanzar un mensaje optimista cuando el Sporting afronta el tramo final de Liga, con la dificultad de que el equipo está a once puntos del play-off. "Solo pensamos en el siguiente partido", indicó el lateral.

"El triunfo ante el Numancia fue muy importante", reconoció ayer en Mareo. "Veníamos de tres derrotas, anímicamente nos afectó. Y era importante ganar fuera de casa también", subrayó. Ahora el conjunto rojiblanco recibirá este sábado en casa al Almería. "Hay que ser fuertes. Ya se han ido muchos puntos de El Molinón, no se pueden escapar más", comentó antes de añadir que "jugamos en nuestro campo y con nuestra gente. El Molinón tiene que ser un fortín para el Sporting. Hay que regalarle victorias a la afición". Por último indicó que "se nos escaparon varios partidos por detalles, hay que corregirlo".