Con el partido del domingo ante el Mallorca, el Sporting iniciará otra dura cuesta empinada esta temporada. Será el momento en el que comience un corto e intenso periplo de cinco citas para jugar en apenas quince días (es decir un partido cada tres días), los que irán de este domingo 22 de noviembre al domingo 6 de diciembre. Y a esta cuesta llega David Gallego con una situación delicada. Por lo pronto el domingo para Son Moix tiene tres bajas fijas, la del sancionado Carmona, la de Bogdan tras su positivo por covid con Ucrania y la de Nacho Méndez, con una rotura fibrilar en los isquiotibiales izquierdos.

Además, el técnico rojiblanco sigue con Cristian Salvador y Marc Valiente en el dique seco y sin estrenarse esta temporada. Y también con Pablo Pérez trabajando al margen. De esta forma, el Sporting afrontará sin seis efectivos el partido de Mallorca. Pero Gallego tendrá una buena noticia: volverá a tener disponible a Manu García. El centrocampista tiene previsto incorporarse hoy a los entrenamientos tras los partidos que jugó con la selección sub-21 de España. En un curso con problemas para el técnico, al tener solo 18 fichas profesionales, lo que le obliga a hacer malabares y no incurrir en alineación indebida, el Sporting tendrá el partido de este sábado en Mallorca una prueba de fuego importante. Será frente a un rival que solo perdió en la primera jornada. Desde entonces, los mallorquines han enlazado once jornadas invictos, racha que les ha permitido arrebatarle el puesto de ascenso directo a los rojiblancos, pese a los buenos registros de los gijoneses.

Gallego tendrá que hilar fino en otro periodo en el que la previsión sería la de tener que volver a rotar para dosificar al equipo, pero en el que no va a tener muchos recursos a su alcance para llevar a cabo los cambios. Sin Bogdan, Guille Rosas no tendrá recambio. Gragera, Pedro Díaz y Javi Fuego serán los únicos que podrán alternar en el centro del campo, ante las ausencias de Cristian Salvador y Nacho Méndez. Y en el eje de la zaga solo Pelayo Suárez estaría para refrescar a Babin y Borja López. Y eso teniendo en cuenta la circunstancia de que el Sporting tendrá que tener siempre en el césped un mínimo de siete jugadores con ficha profesional.